Trump-Kim Jong Un, Obama-Castro o Kim Jong Un-Moon, los apretones de manos que hicieron historia

Trump-Kim Jong Un, Obama-Castro o Kim Jong Un-Moon, los apretones de manos que hicieron historia

U.S. President Donald Trump shakes hands with North Korean leader Kim Jong Un at the Capella Hotel on Sentosa island in Singapore June 12, 2018. REUTERS/Jonathan Ernst
U.S. President Donald Trump shakes hands with North Korean leader Kim Jong Un at the Capella Hotel on Sentosa island in Singapore June 12, 2018. REUTERS/Jonathan Ernst

 

 

El presidente estadounidense Donald Trump y el líder norcoreano Kim Jong Un se dieron este martes un apretón de manos a su llegada a una cumbre en Singapur, una imagen todavía inimaginable hace algunos meses y que recuerda otros saludos que hicieron historia.





Kim Jong Un y Moon Jae-in
El 27 de abril de 2018, pocas semanas antes de la cumbre Kim-Trump de Singapur, el líder norcoreano dio un apretón de manos al presidente surcoreano Moon Jae-in en la línea de demarcación que divide la península de Corea.

Kim se convirtió así en el primer líder norcoreano en pisar territorio surcoreano desde la guerra de Corea (1950-1953). Moon también pasó la frontera hacia al norte, invitado por Kim Jong Un.

Este encuentro de varias horas entre los dos hombres marcó un pasó más en la distensión en la península, que había empezado en febrero con la participación del Norte en los Juegos Olímpicos de Invierno disputados en el Sur.

Obama y Raúl Castro
El 10 de diciembre de 2013, en Sudáfrica, el presidente estadounidense Barack Obama sorprendió al mundo estrechando la mano de su homólogo cubano Raúl Castro durante el funeral de Nelson Mandela.

En el estadio de Soweto, Obama, que se dirigía a la tribuna para pronunciar un discurso, dio la mano a varios líderes mundiales, incluyendo a Castro. Las imágenes de la televisión sudafricana mostraron que también intercambiaron algunas palabras.

Aunque los dos países no tenían relaciones diplomáticas oficiales desde 1961 y una larga historia de hostilidad, ese gesto fue el punto de partida de un acercamiento que, un año más tarde, llevaría a retomar relaciones diplomáticas.

Isabel II y McGuinness
Una de las imágenes más emblemáticas del proceso de paz en Irlanda del Norte fue la del apretón de manos del 27 de junio de 2012, en un teatro de Belfast, entre la reina Isabel II y el excomandante del Ejército Republicano Irlandés (IRA) Martin McGuinness.

Tras haber luchado contra la dominación británica durante 30 años en Irlanda del Norte, McGuinness se convirtió en un de los negociadores clave de los acuerdos del Viernes Santo de 1998 y en uno de los artífices del desarme del movimiento en 2005.

Arafat y Rabin
El 13 de septiembre de 1993, en Washington, el primer ministro israelí Isaac Rabin y el líder de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), Yaser Arafat, enemigos declarados, se reúnen bajo la atentada mirada del presidente estadounidense Bill Clinton.

Ese día, en el jardín de la Casa Blanca, acaban de firmar una declaración de principios sobre una autonomía palestina transitoria de cinco años, negociada secretamente en Oslo.

Clinton se gira entonces hacia Rabin y le da la mano y luego hace lo mismo con Arafat, del otro lado. El dirigente palestino, que se inclina un poco, sigue el movimiento y tiende una mano hacia el primer ministro israelí. Tras un momento de duda, ambos se estrechan la mano bajo los aplausos del público.

A pesar de ese momento histórico, el conflicto entre Israel y los palestinos sigue hoy en día en un callejón sin salida.

Sadat y Begin
El 19 de noviembre de 1977, el presidente egipcio Anuar Sadat fue el primer jefe de Estado árabe en viajar a Israel tras su fundación, en 1948, y después de cuatro guerras arabo-israelíes.

Sadat llegó al aeropuerto de Lod, cerca de Tel-Aviv, para una visita de 43 horas. Al pie del avión le esperaban su homólogo Efraim Katzir y el primer ministro Menahem Begin. Los tres hombres se dieron la mano detrás de una nube de fotógrafos y guardaespaldas.

Ese histórico viaje a Jerusalén abrió la vía a los acuerdos de Camp David, que en 1979 permitieron firmar un tratado de paz entre Israel y Egipto, el primero entre Israel y uno de sus vecinos.

Anuar Sadat, muy criticado en su propio país, murió asesinado en 1981 a manos de los islamistas.