Ryan A. Penman y su novia pidieron ver un par de zarcillos de diamantes en una joyería en Florida. Uno se lo puso en la oreja a la mujer y otro en la suya. Tras confirmar que lucían estupendos procedió a pagar con una tarjeta de crédito, pero cuando el sistema de la tienda la rechazó el hombre trató de devolver unos zarcillos falsos y se tragó los verdaderos, publica El Nuevo Herald.
POR SONIA OSORIO
sosorio@elnuevoherald.com
El hecho sucedió en Leesburg, Florida, el jueves pasado, en Kay Jewelers de Lake Square Mall. Penman fingió ser un cliente y una vez que él y la novia tenían puestos los aretes y que la tarjeta no funcionó, le dijo al empleado de la joyería que se los devolvería para que los retuviera hasta el día siguiente cuando regresaría a buscarlos, según informó el medio Daily Commercial.
Pero el empleado de inmediato se percató de que los aretes que le estaba devolviendo eran falsos y Penman, sin que el dependiente se diera cuenta procedió a engullir los verdaderos, de acuerdo con el reporte policial citado por ese medio.
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