La Fiscalía brasileña aseguró que la decisión del Comité de Derechos Humanos de la ONU de dar garantías a la candidatura del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, preso por corrupción, es “precipitada” y no puede ser ejecutada.
EFE
Así se pronunció el fiscal Maurício Gotardo Gerun sobre un recurso presentado en segunda instancia por la defensa de Lula para que el exmandatario pueda ofrecer entrevistas desde el interior de la prisión, donde cumple una pena a 12 años por corrupción pasiva y lavado de dinero.
“Precipitada, la solicitud del Comité de Derechos Humanos de la ONU no se puede ejecutar”, evaluó el fiscal sobre el recurso, que debe ser contestado por el Tribunal Regional de la Cuarta Región de Porto Alegre.
El Comité de Derechos Humanos emitió la pasada semana una decisión cautelar no vinculante en la que pidió que se tomen “todas las medidas necesarias” para que Lula “pueda ejercer sus derechos políticos” como candidato presidencial para las elecciones de octubre, aunque esté en prisión.
Eso incluye, según matizó en una nota, “tener acceso apropiado a la prensa y a los miembros de su partido político”.
El fiscal, en su parecer, aseguró que Lula no es “inelegible” por el hecho de estar preso, sino por estar condenado en segunda instancia, lo que, según las normas del país, impide postular a un cargo electivo.
A pesar de su encarcelamiento y de estar prácticamente inhabilitado, el ex jefe de Estado pretende presentarse a las elecciones presidenciales de octubre y sigue como favorito, con alrededor de un 37 % de intención de voto, según dos encuestas divulgadas hoy.
Por detrás de Lula las encuestas sitúan al candidato ultraderechista Jair Bolsonaro, con una media de 18 % de apoyos, seguida de la ecologista Marina Silva (entre el 5,6 % y 6 % de intención de voto), el socialdemócrata Geraldo Alckmin (alrededor de un 5 %), el laborista Ciro Gomes (entre el 4,1 % y 5 %) y el liberal Álvaro Dias (alrededor de un 3 %).