Las imágenes, no aptas para estómagos susceptibles, muestran una sanguijuela retorcida después de haber sido quitada de la nariz de un hombre.
Midiendo alrededor de dos centímetros y medio, el parásito chupador de sangre se ve retorciéndose después de haber sido removido suavemente de la ventana nasal del paciente.
El paciente, conocido solo por su apellido Pan, admitió haber nadado en un río en su pueblo tres meses antes. Los médicos creen que esto provocó que las larvas de sanguijuelas ingresaran a su fosa nasal antes de nacer y crecer.
Pan fue al Hospital “Dongguan Chang’an” en la provincia de Guangdong, sur de China, luego de experimentar una hemorragia nasal casi sin parar durante 10 días.
Preocupado por “tirar” de la sanguijuela, y que el parásito chupador de sangre se rompería en dos, los médicos lentamente liberaron a la criatura parecida a un gusano con unas pinzas.
Fuente y video: DailyMail