Antonio Denarium, candidato del Partido Social Liberal (PSL), que lidera Jair Bolsonaro, fue elegido este domingo gobernador del estado brasileño de Roraima, fronterizo con Venezuela, y que ha soportado una fuerte presión migratoria de ciudadanos de ese país en los últimos años.
Denarium, empresario del sector ganadero, venció este domingo con un 53,46 % de los votos frente al 46,54 % que consiguió José de Anchieta, aspirante del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), según los resultados oficiales con un 92,15 % del censo escrutado.
El empobrecido estado de Roraima, el menos poblado de Brasil, se ha convertido en los dos últimos años en la puerta de entrada de miles de venezolanos que huyen vía terrestre de la crisis económica, social y política que atraviesa su país y deciden instalarse en el gigante suramericano.
La fuerte presión migratoria sobre Roraima ha marcado gran parte de la campaña electoral para gobernador.
Denarium manifestó durante la campaña que buscará restringir la entrada de venezolanos por medio de la presentación obligatoria de la cartilla de vacunación y de un atestado de antecedentes criminales.
El candidato del PSL, cuyo nombre de pila es Antonio Oliverio García, ganó igualmente la primera vuelta de las elecciones el pasado día 7, al obtener un 42,27 % de los votos frente al 38,78 % que obtuvo Anchieta.
Denarium tendrá en la Presidencia de Brasil a un aliado después de la victoria en la segunda vuelta de Bolsonaro, quien consiguió un 55,54 % frente al 44,46 % que obtuvo el progresista Fernando Haddad, del Partido de los Trabajadores (PT), con el 99,51 % de las mesas escrutadas.
Las autoridades brasileñas estiman que entre 700 y 800 venezolanos cruzan diariamente a la localidad de Pacaraima, único paso único paso fronterizo entre Brasil y Venezuela.
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En agosto pasado, Pacaraima fue el escenario de protestas violentas de parte de la población local contra campamentos de inmigrantes venezolanos, a los que quemaron las tiendas de campaña donde dormían y sus objetos personales.
La tensión vivida en ese municipio provocó que al menos 1.200 venezolanos decidieran regresar a su país y que el Gobierno brasileño reforzara las medidas humanitarias ya puestas en marcha meses atrás y enviara un nuevo contingente de las Fuerzas Armadas para fortalecer la seguridad.
Según datos oficiales, desde 2017 han entrado a Brasil un total de 154.920 venezolanos vía terrestre por Pacaraima, aunque algo más de la mitad, cerca de 80.000, ya abandonaron el territorio nacional.
Algunos miles de ellos continúan en condiciones precarias en Boa Vista, la capital regional, lo que ha generado una saturación de los servicios públicos de Roraima, según denunció su Gobierno.
El Ejecutivo de la todavía gobernadora Suely Campos pidió incluso el cierre temporal de la frontera, una posibilidad que fue rechazada de plano por el Gobierno central y negada por la Justicia brasileña.
EFE