Tres personas resultaron heridas y otra se encuentra desaparecida tras el hundimiento la pasada medianoche del dique flotante en que se hallaba en reparaciones el único portaaviones de la Armada rusa, el “Admiral Kuznetsov”, informaron hoy medios locales.
“Según datos preliminares, el navío no sufrió daños que pueden influir en los plazos previstos de su reparación”, dijo hoy a la agencia Interfax un portavoz de la corporación estatal Astilleros Unidos.
El accidente se produjo en los astilleros 89 del puerto de Murmansk, a orillas del mar de Barents.
Una fuente de los servicios de emergencia locales indicó que el hundimiento del dique flotante PD-50 se produjo a consecuencia de una “brusca caída de la tensión eléctrica” cuando el “Admiral Kuznetzov” salía de él.
“El dique flotante, de acuerdo con los primeros datos, no contaba con los suficientes sistemas de protección ante caídas de tensión. Así, el fallo eléctrico afectó el sistema de inmersión del dique, lo que provocó la avería”, dijo la fuente, citada por Interfax.
Medios de Murmansk indicaron que el accidente provocó la caída de dos grúas, una de la cuales cayó sobre la cubierta del portaaviones.
“ElPD-50 es un dique flotante de gran capacidad. Solo tenemos dos de este tipo. Hay otro en el Extremo Oriente. Creo que es un gran pérdida para nuestros astilleros”, comentó el almirante Vladímir Komoyédov, ex comandante en jefe de la Flota rusa del mar Negro.
Según Komoyédov, una avería de este tipo es impensable sin conductas negligentes.
Tras el accidente, el “Admiral Kuznetsov” fue remolcado hasta los astilleros 35.
EFE