Comunidad Internacional, alarmada por el grave peligro regional que representa la crisis venezolana, está esperando que los líderes opositores de ese país asuman el papel histórico de diseñar el camino fuera de la crisis, dijo el recién nombrado embajador de Colombia ante Estados Unidos, Francisco Santos, reseñó El Nuevo Herald.
Y es urgente de que lo hagan, resaltó el diplomático, al enfatizar que el éxodo de venezolanos ingresando a los países vecinos pronto podría sumar los 10 millones.
En una reunión sostenida con la junta editorial del Miami Herald y el Nuevo Herald, Santos enfatizó que el colapso de la oposición venezolana es hoy en día el mayor obstáculo para derribar la dictadura criminal que mantiene secuestrada a Venezuela, y que si la oposición venezolana llegará a determinar cual es el camino para salir del régimen, él no tiene dudas de que muchos gobiernos seguirían esa ruta.
“Yo no tengo dudas de que si ellos asumieran el liderazgo, hasta Estados Unidos les seguiría. Ellos hoy tienen más legitimidad que el gobierno. Es el momento de que ellos salgan y den la cara”, dijo Santos en la sede del periódico en Miami.
La desorganización de la oposición “es la peor parte. Ellos están esperando que sean los otros los que les resuelvan los problemas, y eso es un gran error. Nadie lo va a hacer por ellos”, enfatizó Santos.
El diplomático dijo que muchos de los líderes de la oposición entienden que la situación venezolana requiere de medidas de emergencia, pero no se están poniendo de acuerdo.
Y tienen que hacerlo, insistió.
“Si ellos muestran el camino, eso le va a quitar el costo a muchos de los gobiernos de la región para poder actuar. Y esos gobiernos, simplemente dirán ‘bueno, nosotros vamos a hacer esto con ustedes’”, añadió.
El embajador formuló los comentarios en momentos en que Estados Unidos incrementa la presión contra el régimen bolivariano de Caracas, anunciando el jueves que está preparando nuevas sanciones.
Hasta el momento, los países de la región han estado negando que se esté preparando algún tipo de intervención militar para frenar lo que ya está siendo descrita como la peor crisis humanitaria en la historia de la región.
No obstante, la tesis de que eventualmente se produzca ese tipo de incursión en territorio venezolano se ha vuelto más frecuente en la medida que la crisis empeora y el régimen continua dando señales que está dispuesto a tornarse mucho más cruel y opresivo para mantenerse en el poder.
El éxodo de venezolanos volcándose sobre sus países vecinos está actualmente ejerciendo enorme presión sobre sus gobiernos, que ahora deben lidiar con cientos de miles de venezolanos deambulando por sus calles y sumándose a la economía informal.
Santos dijo que en la región ha estado aumentando la sensación de que algo hay que hacer ante proyecciones de que ya han salido más de tres millones de venezolanos del país para escapar del colapso económico y social provocado por el régimen de Nicolás Maduro.
Muchos de ellos se encuentran actualmente en Colombia, lo que está generando un gravísimo problema al vecino país, que difícilmente ha podido atender el masivo ingreso de venezolanos.
“Estamos viendo una caravana de unos 5,000 hondureños y aquí [en Estados Unidos] es un escándalo gigantesco. Nosotros hemos tenido caravanas de 10,000, y 15,000 y hasta 20,000 día tras día, caminando a lo largo de Colombia. Hemos tenido eso a lo largo del año”, dijo.
Por eso el volumen visto hasta ahora podría ser solo el comienzo si no se supera la situación en el país petrolero.
“He escuchado que hasta un 30 por ciento de la población de Venezuela podría terminar saliendo. Esas son unas diez millones de personas. Ese es un número que yo he estado comenzando a escuchar. Eso es una crisis humanitaria gigantesca, masiva”, señaló.