Araque era un activo guerrillero de los grupos armados de las FALN que luchaban contra los gobiernos del llamado Pacto de Puntofijo, que conformaba la alternancia exclusiva del bipartidismo COPEI y AD, elegidos democráticamente, pero que habían marginado a los comunistas y otros partidos, tanto de derecha como de izquierda.
Rodríguez Araque adoptó el seudónimo “Comandante Fausto”, liderando frentes guerrilleros destacando como experto en explosivos. Ingresó en 1966 en el Partido de la Revolución Venezolana (PRV) donde colaboró activamente con el líder guerrillero Douglas Bravo.
En agosto de 1979, y luego de una profunda crisis estructural interna del PRV, abandona las filas de esta organización y con el grueso de militantes crea “Tendencia Revolucionaria”, grupo semi legal que inicialmente mantuvo una posición guerrerista pro lucha armada pero que en realidad no logró consolidarse como núcleo revolucionario en ese momento.
Rodríguez decidió dejar las armas, aunque hace más de una década en 1971 el presidente Rafael Caldera había decretado una amnistía y pacificación.
Rodríguez siguió la política por una escisión del Partido Comunista de Venezuela: Causa R, desde 1983 a 1997, durante este último año fue disidente de su partido y se alió a la corriente de Pablo Medina, de ella surgió una nueva organización Patria Para Todos, conformado por los causaerristas que apoyaron el Caracazo.
Rodríguez había apoyado la intentona golpista del 4 de febrero de 1992 así como al líder de la rebelión de Hugo Chávez, como candidato presidencial a las elecciones de diciembre de 1998.
Fue elegido ministro de la energía de Venezuela a partir de 1999, cuando Chávez accedió a la presidencia, luego secretario general de la OPEP promoviendo la reducción de petróleo para conseguir un aumento de su valor en los mercado, fue relevado en el cargo el 31 de junio de 2002 por Álvaro Silva Calderon.
Pasando a ejercer el cargo de presidente de Pdvsa, donde falló en sus esfuerzos de resolver el conflicto interno que enfrentaba la directiva de la empresa con el gobierno, y finalmente tuvo que sacar de nómina a más de quince mil trabajadores que abandonaron sus puestos de trabajo en una prolongada huelga general de dos meses y que afecto a PDVSA, calificado por el chavismo como Golpe petrolero.
Rodríguez permaneció en ese cargo hasta noviembre de 2004 en una modificación del gabinete Chávez lo designó Ministro de Asuntos Exteriores.
En 2006 sufrió un ataque cardiaco que lo obligó a dejar el cargo, siendo sustituido por Nicolás Maduro, hasta entonces diputado y Presidente de la Asamblea Nacional y considerado de línea más dura y cercano a Chávez.
En 2012 ocupa la Secretaria General de la Unasur hasta 2014. Actualmente era embajador en Cuba donde fallecería el 19 de noviembre del 2018.