Con seguridad, buena parte del público masculino idealiza una vida perfecta repleta de lujos y mujeres. Algunos, más osados, se imaginan en un yate que se desliza sobre el oceáno sin rumbo ni resistencia; espumoso champagne por doquier; accesorios de oro o seda y, debido a que tal fantasía lo permite, la cálida compañía de sus actrices eróticas preferidas… “Seguro alguien con mucho dinero o talento sí lo hace”, es el pensamiento fugaz que invade a cualquier soñador. Por ello, este artículo describe a ese personaje con una vida envidiable: un tal Greg Lansky, quien figura como el director más prestigioso de la pornografía moderna.
Por @eldanielfender / lapatilla.com
Lansky nació en París el 12 de diciembre de 1982. Empezó a tomar fotografías a los catorce años, durante unas vacaciones familiares en Saint Tropez, ciudad vecina al Mediterráneo. Desde su juventud, capturaba a las modelos mientras tomaban el sol en la playa. A pesar de trabajar para varias cadenas de televisión, la fotografía siguió siendo la principal pasión de Lansky.
Pero su vida dio un giro de 360 grados cuando, en el año 2000, se mudó a Los Ángeles, donde Lansky se desempeñaba en los negocios inmobiliarios. Sin embargo, Mike Adriano, un reconocido actor porno, lo acercó a la industria gracias a su estrecha amistad.
“¿A qué adolescente no le gusta la industria adulta?”, cuestiona Lanksy en una entrevista para la revista Rolling Stone. Aseguró que junto a Adriano pensaba: “¡Oh, sería tan bueno producir esas películas!”.
Poco después, Scott Taylor, propietario del estudio New Sensations, lo contrató como director tras una época de vacas flacas. Lanksy trabajó para dicha marca hasta 2007, cuando pensó en abrir su propia productora. “En ese momento sabía cómo venderme pero, honestamente, no tenía muy buenas habilidades”, comentó a Men´s Health. “Me esforzé para hacer la mejor película que pude. Lento pero seguro, (me engañé, supongo) subí hacia la cima”, añadió.
Propuesta estética exitosa
Luego se mantuvo en Reality Kings hasta el año 2014 cuando, podría decirse, pasó a jugar en la Grandes Ligas al fundar Blacked, su primera compañía. Y no se trataba de cualquier propuesta reciclada, sino de un sitio web novedoso, especializado en el género interracial. Su material no tardó en destacarse gracias a una estética impecable, obsesionada por resaltar el contraste entre inmaculadas pieles blancas y viriles siluetas oscuras.
Pero Lansky no se detuvo allí: Tushy fue su siguiente iniciativa, la cual ascendió como la espuma. Y sí, también se trataba de una página especializada, esta vez en el “arte del sexo anal”. Grandes estrellas del universo erótico hicieron su debut en este tipo de escenas, de la mano de Tushy. La cándida y traviesa Riley Reid, por ejemplo, fue una de ellas.
Finalmente, en el 2016, Vixen sería la cereza del pastel. Respaldado por temáticas convencionales pero inagotables, Lansky se aventuró a profundizar en el aspecto artístico. Locaciones de ensueño; enormes mansiones; autos deportivos de infarto; piscinas al borde de un precipicio; el crepúsculo alucinante de Ibiza; una tibia mañana en Los Ángeles… todo lo que funcionara para recrear una experiencia única en el espectador. Sin hablar del hábil manejo de camara, que incluye drones y hasta dollys.
Blacked Raw y Tushy Raw, más recientes, enfatizan el protagonismo femenino dentro de cada escena, quizás con una perspectiva más “hardcore”.
En algunas ocasiones, Lansky ha sido señalado de producir “porno burgués”. Él se desmarca admitiendo que incluye cada elemento tan solo porque le inspira. Con cierta frecuencia, publica fotos en Instagram junto a sus compañeras actrices, sentadas en un sillón de oro, al costado de un estante con innumerables estatuillas AVN (algo así como los Oscars del cine erótico). Todo lujo, todo éxito.
Por otra parte, el éxito de los estudios de Lansky está muy ligado a una explosiva campaña publicitaria que no tiene nada que envidiarle a las más reconocidas marcas de moda. De hecho, en muchos casos, las supera. Y bueno, un mensaje sencillo pero directo, chicas exuberantes, autos gran turismo… ¿cómo no va a funcionar?
“El entretenimiento para adultos es arte y los artistas adultos son artistas, no dejes que nadie te diga lo contrario”, afirmó sonriente el barbudo director durante su emblemático discurso en los premios AVN 2016. En multitud de ocasiones, Lansky ha enfatizado la importancia de reconocer al cine erótico.
Asimismo, este particular director afirma que sus “imágenes muestran a la mujer siendo poderosa. No están disminuidas a un rol o inferior, como la pornografía del pasado, donde las mujeres se usan más como objetos. Eso ha sido muy importante para nosotros”.
Una cuenta de Instagram muy particular
“Un jefe no se preocupa por las opiniones de otras personas. Un jefe nunca odia a los demás y eleva a las personas que lo rodean. Un jefe mantiene limpia su energía y sus pensamientos positivos. Comienza a actuar como un jefe y te convertirás en uno“, son algunas de las afirmaciones que postea Lansky en su Instagram, donde a veces puede confundirse más bien con un coach de emprendimiento personal.
Pero su redes no van solo de mensajes positivos. Realmente, la mayor parte de su contenido esta dedicado a su trabajo y su día a día, junto a varias de las mujeres más atractivas del planeta.
Por este motivo, puedes ver en dicha cuenta a Tori Black sobrevolando el Hollywood Sing en helicóptero; a Lansky muy mal acompañado por cinco diosas en un yate; o a la juguetona Kendra Sunderland ofreciéndole el desayuno. Un espectáculo que opacaría al propio Dan Bilzerian.
Y hablando de playboys, ¿es posible que Lansky sea el nuevo Hugh Hefner?
Fuentes consultadas: