Una niña de 13 años, que había desaparecido la misma noche en que sus padres murieron asesinados hace tres meses en una región rural del norte de Estados Unidos, fue hallada con vida el jueves, anunció la policía.
La muerte de sus progenitores y la misteriosa desaparición de Jayme Closs conmocionaron al estado de Wisconsin, en la región de los Grandes Lagos, y tuvieron repercusión en todo el país.
La chica apareció al norte del pueblo donde vivía, Barron, según el comunicado publicado en la cuenta de Facebook del sheriff del condado, Chris Fitzgerald.
La policía detuvo a un sospechoso poco después, añadió Fitzgerald, sin dar más detalles.
Las fuerzas de seguridad darán este viernes una rueda de prensa en Barron, una localidad de unos 3.400 habitantes.
Jayme Closs habría logrado huir de una casa donde la tenían encerrada, en una zona boscosa cercana a la pequeña ciudad de Gordon, informó el diario Star Tribune de Minneapolis.
La adolescente, que iba sucia, con el pelo enmarañado y unos zapatos demasiado grandes, contó con la ayuda de vecinos que alertaron a la policía.
El 15 de octubre de 2018, el doble homicidio de los Closs, una pareja aparentemente apacible que trabajaba en una granja avícola local, desconcertó a las autoridades de Wisconsin.
En ausencia de arma y de móvil evidente, el misterio aumentó con la prolongada desaparición de la hija, a pesar de la búsqueda llevada a cabo por la policía y por miles de voluntarios.
AFP