Los enviados diplomáticos de Juan Guaidó a Estados Unidos han iniciado ya las conversaciones con el Gobierno norteamericano para tomar el control de la embajada y los consultados propiedad de la república venezolana en este país. Después de años de tensión bilateral, la presencia diplomática del régimen de Nicolás Maduro en EE.UU. era raquítica cuando Juan Guaidó se proclamó presidente interino del país el 23 de enero, publica ABC.
Por David Alandete
Washington
El nuevo embajador venezolano, Carlos Vecchio, ha sido recibido en la Casa Blanca, el departamento de Estado y, más recientemente, el Tesoro, donde ha obtenido indicaciones para que el Gobierno de Guaidó tome también el control de las cuentas de reserva donde se van a depositar los fondos incautados por todas las sanciones aplicadas al régimen. La Casa Blanca estima que esos fondos pueden ascender a 11.000 millones de dólares (9.600 millones de euros).
La diplomacia norteamericana inició ayer contactos con Canadá para que ese país imite esas gestiones y refuerce así al nuevo Gobierno venezolano al que ha reconocido como legítimo la mayoría de países de América Latina, con la destacada excepción de México y Uruguay. Ayer conversaron sobre el asunto el secretario de Estado norteamericano, Mike Pompeo, y su homóloga canadiense, Christa Freeland.
Venezuela dispone de varios edificios en Estados Unidos. En Washington, aparte de la embajada, que subsiste con un personal muy reducido, posee un edificio donde tradicionalmente se alojaba la agregaduría militar y que ahora está en estado ruinoso. El agregado militar designado por Maduro, coronel José Luis Silva, ha reconocido formalmente a Guaidó y está en contacto con otros uniformados para se unan al rechazo a los abusos del régimen de Maduro.