La vicepresidenta nacional del Movimiento al Socialismo MAS, María Verdeal, advirtió que un final de modo violento tanto de Maduro como de su gobierno “seguramente no nos va a traer la tranquilidad que deseamos la mayoría de los venezolanos. Nunca va a ser tarde para lograr la negociación por lo que es necesario fijar una salida democrática y una ruta electoral. Maduro tiene que entender que debe dejar la presidencia porque no tiene gobernabilidad”.
Señaló que desde el partido naranja condenan la violación sistemática y reiterada de los Derechos Humanos a los hermanos indígenas en La Gran Sabana el pasado sábado 23 de febrero, “quienes fueron atacados vilmente tanto por organismos de seguridad del Estado como de civiles armados, que fueron denominados por voceros del gobierno de Maduro, como el poder popular y que no son más que paramilitares actuando al lado de la Guardia Nacional y el Ejército venezolano en contra de una población civil desarmada”.
Precisó que lo que el país presenció en las fronteras con Brasil y Colombia, aparte de atentar en contra de los Derechos Humanos, “demuestran el abuso de poder, de las armas y el amedrentamiento del régimen hacia ciudadanos que están exigiendo que les lleguen insumos y medicinas que tanto necesitan, algo que viola todos los tratados y convenios internacionales suscritos y ratificados por Venezuela”.
Deploró que al siguiente día, el domingo 24, se siguieran ejecutando persecuciones, seguimiento y detenciones, situación a la que se suma un número aún no determinado de víctimas y desaparecidos, por lo que destacó que desde el MAS exigen una investigación objetiva por parte del Ministerio Público, instancia que hasta los momentos no se ha pronunciado. “Hay que investigar la línea de mando ¿Quién dio la orden de atacar a los indígenas? ¿Quién la ejecutó y quiénes son los responsables directos de estas acciones?”.
Recordó que semanas antes, el Movimiento al Socialismo dijo que era un error de Maduro no permitir el ingreso de la ayuda humanitaria. “Un término que no admitían pero que ahora aceptan cuando dijeron que venía una ayuda humanitaria de Rusia que si se iban a permitir porque era comprada. Con esto, colocan el drama del país entre una ayuda buena y otra presuntamente mala”.
En su opinión, el gran perdedor fue el pueblo venezolano cuando fue víctima de la “brutal censura” a medios de comunicación de lo que estaba ocurriendo el pasado sábado cuando se apreciaron imágenes de la quema de una gandola así como de insumos justo al cruzar el puente Francisco De Paula Santander en la población de Ureña en sentido hacia Venezuela. “Los extremos decidieron polarizar en torno a la entrega de alimentos e insumos y ante la negativa de Maduro de que estos camiones entraran al país, fuimos testigos de escenas lamentables y detestables que llegaban por las redes sociales”.
Para María Verdeal, la población en general se encuentra en una situación de “extrema intolerancia” que podría desencadenar hechos no deseables en cualquier momento. “Los sectores democráticos no queremos ningún tipo de salida violenta, mucho menos la confrontación entre hermanos ni tampoco que se masacre vilmente a los ciudadanos”, concluyó. /Nota de Prensa