El diario The New York Times publicó hoy un artículo en el que acusa a Nicolás Maduro de utilizar alimentos y medicinas para presionar a los ciudadanos antes de las “elecciones” presidenciales de 2018, advirtiéndoles que dejarían de recibir subsidios y tratamientos si no votaban por el chavismo.
En concreto, habla del testimonio de 16 integrantes de las misiones médicas cubanas a Venezuela, que describieron un sistema de manipulación política deliberada, como no utilizar medicinas de primera necesidad en pacientes con el objetivo de reservarlas para el periodo electoral, cuando se exigían votos a favor de Maduro a cambio de tratamientos.
“Maduro y sus partidarios han usado a su favor el colapso económico de la nación para mantenerse al mando de Venezuela: han tentado a votantes hambrientos con comida, han prometido subsidios adicionales con la victoria de Maduro y han exigido que la gente que acudiera a las urnas presentara los carnets de identificación partidista para el reparto de raciones del Gobierno”, dice el texto.
Las fuentes apuntaban a varias técnicas, “desde simples recordatorios para votar por el Gobierno hasta denegar tratamiento a los simpatizantes de la oposición que tienen enfermedades mortales”.
Además, afirman que se les ordenó ir puerta a puerta en barrios empobrecidos para ofrecer medicinas a la vez que se les advertía de que “se les cortaría el acceso a los servicios médicos si no votaban por Maduro o por sus candidatos”.
Mismas amenazas que a estos médicos se les ordenó hacer a puerta cerrada, en las consultas con pacientes que padecían de enfermedades crónicas.
El asesor de seguridad nacional de EEUU, John Bolton, publicó un comentario sobre el artículo en la red social Twitter, en el que dijo que lo narrado no resulta sorprendente.
“No debería ser una sorpresa que Maduro y sus jefes cubanos han mentido y matado para usurpar la democracia y robar la riqueza del pueblo Venezolano”, dijo Bolton.
“Este es un claro ejemplo de cómo Maduro ignora las necesidades de la gente y empeora la situación para su provecho personal”, agregó.
Venezuela afronta una crisis política y social que se acentuó después de que el pasado 23 de enero el líder del Parlamento, Juan Guaidó, se declaró mandatario interino al invocar unos artículos de la Constitución venezolana y logró el respaldo de buena parte de los países del continente americano, incluido EEUU, y otras 60 naciones.
Los líderes de la transición venezolana, que no reconocen la “juramentación” de Maduro el pasado 10 de enero, al considerar ilegítimas las elecciones de mayo del 2018, aseguran que el país atraviesa una “emergencia humanitaria compleja” y solicitan ayuda a la comunidad internacional para atenderla.
Con información de EFE