A juicio de Cástor González, presidente del Centro Popular de Formación Ciudadana (CPFC), un nuevo Consejo Nacional Electoral no será suficiente para garantizar elecciones libres y transparentes sino se mete la lupa al Registro Electoral, y principalmente en la problemática derivada de los fallecidos que aún aparecen como votantes activos en virtud de que allí está en parte el meollo del fraude electoral que sistemáticamente ha construido el desgobierno.
La oposición y principalmente quienes han asumido la delicada responsabilidad del denominado seguimiento a los procesos electorales, deben entender que el fraude que ha perfeccionado el desgobierno a lo largo de los últimos años, está construido sobre el control del registro civil, el registro electoral y el precario sistema de cedulación existente, lo cual han utilizado a su favor en los últimos procesos de elección, arrojando resultados de participación obscenamente inverosímiles, reiteró.
En este orden de ideas, el presidente del CPFC, ONG desde donde han investigado y detectado graves irregularidades en el Registro Electoral, dijo que la Asamblea Nacional tiene el poder, la potestad y la obligación de iniciar la revisión del registro electoral y a tal efecto debe designar con urgencia una comisión ad hoc para iniciar esa tarea de revisar al menos el caso de los fallecidos, en vista del impacto que ello ha tenido en la manipulación de la voluntad del pueblo.
“Desde el CPFC hemos venido alertando al país de esta situación, que sin lugar a dudas ensombrece cualquier proceso electoral transparente que desee hacerse. No obstante, la gravedad de la situación detectada con respecto a los fallecidos en el registro electoral, nos obliga a tomar las medidas que sean necesarias, para al menos dotar a los testigos opositores de la información que les permita impedir la perpetración de un nuevo fraude”, señaló.
Finalmente dijo que en un país tan saturado como Venezuela, con una crisis humanitaria devastadora, el tema electoral hay que manejarlo seriamente y de manera transparente. “Si bien es cierto que el voto es la herramienta más importante para impulsar un cambio de gobierno de manera democrática, las garantías al elector deben estar muy claras, porque los antecedentes fraudulentos al respecto, han creado desconfianza y falta de motivación por parte de los venezolanos”, acotó.
Nota de prensa