Una operación coordinada por Interpol contra la pederastia que se inició en 2017 con el control de contenidos que circulaban por Internet, ha permitido liberar hasta ahora a 50 niños y ha conducido al arresto de ocho personas en Tailandia, Australia y Estados Unidos.
Interpol explicó este jueves en un comunicado que la investigación del material encontrado en esta operación, bautizada como Blackwrist, en la que participan casi 60 países, permitirá llevar a cabo más detenciones.
Además, según los cálculos de la agencia policial internacional con sede en Lyon (Francia) otro centenar de niños han podido ser objeto de abusos por esta red.
La investigación comenzó a comienzos de 2017 con el descubrimiento de contenidos en el llamado “darkweb” o Internet oculto que mostraban abusos a once chicos menores de 13 años en una página web que necesitaba suscripción y que tenía 63.000 usuarios por todo el mundo.
El trabajo del Departamento de Investigaciones Especiales de Tailandia en coordinación con Interpol, al que se sumaron investigadores de otros países, permitió que en Estados Unidos se identificara la dirección IP de esa página.
En noviembre de 2017 se identificó a las primeras víctimas y dos meses después se produjeron arrestos simultáneos en Tailandia y en Australia.
En Tailandia fue capturado el principal administrador, Montri Salangam, al que se veía en las imágenes requisadas abusando de 11 chicos, uno de los cuales era un sobrino suyo, y que fue condenado en 2018 a 146 años de cárcel.
En Australia se detuvo a un segundo administrador, Ruecha Tokputza, también por abusar de menores (el más pequeño tenía 15 meses), sentenciado a 40 años, la mayor pena impuesta en ese país por pederastia. Otro profesor de una guardería cercano a Tokputza fue condenado a 36 años por los mismos delitos. EFE