El club argentino River Plate, actual campeón de la Copa Libertadores, buscará el jueves revertir la derrota sufrida en la primera final de la Recopa ante Atlético Paranaense, vigente monarca de la Copa Sudamericana, para reafirmar su dominio futbolístico en el continente.
La revancha se disputará desde las 21.30, hora local, en el estadio Monumental de Buenos Aires, con arbitraje del chileno Roberto Tobar. De imponerse en la serie, River conquistaría su séptimo título internacional en cinco años, todos de la mano del director técnico Marcelo Gallardo.
El encuentro de ida se jugó en la ciudad brasileña de Curitiba, donde Paranaense sacó la mínima ventaja gracias al gol del argentino Marco Ruben.
River, que ganó la Libertadores a finales del 2018 al superar a su clásico rival Boca Juniors, llega como favorito después de haber logrado con Gallardo nueve títulos en los últimos cinco años, entre los que se destacan dos Libertadores, una Sudamericana, dos Recopa y una Suruga Bank.
“Estamos con ganas de quedarnos con la copa en casa y que la gente pueda disfrutar. Vamos a hacer lo que hacemos habitualmente: salir a buscar el partido y asumir nuestra posición futbolística”, dijo el “Muñeco” en una conferencia de prensa.
El técnico riverplatense realizará dos modificaciones en la defensa, a partir de los ingresos de Gonzalo Montiel y de Fabrizio Angileri en reemplazo del uruguayo Camilo Mayada y de Milton Casco, quien fue expulsado en el encuentro de Brasil.
A su vez, el DT confirmó que incluirá en el mediocampo al experimentado Leonardo Ponzio en lugar del joven uruguayo Nicolás De la Cruz.
Por su parte, Paranaense arribó a Argentina el martes por la noche con la presencia del lateral Renan Lodi, liberado de la selección olímpica brasileña para jugar este partido a partir de un pedido especial del club de Curitiba.
La presencia de Lodi le permitirá al entrenador Tiago Nunes mantener la alineación que controló a su rival en el encuentro de ida, jugado sobre una superficie de césped sintético. “Si viajamos a la Argentina sólo para asegurar lo conseguido el miércoles pasado, sufriremos mucho”, señaló Nunes en rueda de prensa.
El conjunto rojinegro, que se entrenará el miércoles por la tarde en el estadio de River, incluyó en la delegación a Thiago Heleno y a Camacho, los dos futbolistas suspendidos por controles antidopaje positivos en la Libertadores, aunque no podrán jugar.
Reuters