El diputado a la Asamblea Nacional (AN), Omar González Moreno, aseveró que “Maduro y su corporación del mal no dejaran el poder sino con la Ruta del Coraje”, esto en referencia a la lista de delitos cometidos por quienes usurpan el poder en el país.
El diputado manifestó que “los accionistas de la corporación criminal que se adueñó de Venezuela, integrada por grupos guerrilleros colombianos, paramilitares, terroristas iraníes, los cubanos, rusos, chinos, turcos y los grandes carteles de la droga, harán lo imposible para esquivar las leyes internacionales”.
El asambleísta reiteró que era descabellado pensar que los encuentros en Noruega iban a terminar en una salida a la crisis. “Una estructura criminal como la que se adueñó de Venezuela no puede negociar nada en ninguna parte, porque sabe que no existe país en el mundo que le perdone sus crímenes ni acepte sus sucios negocios”.
Omar González fue enfático en señalar que el fin que les espera es Guantánamo o cualquier otra prisión internacional, para que paguen por todo el mal que ha hecho en contra de millones de venezolanos.
Aseguró que las negociaciones en Noruega estaban condenadas al fracaso porque sólo participan los representantes de la fachada política de una corporación criminal conformada por muchas cabezas e intereses.
El legislador por el estado Anzoátegui afirmó que la única vía para la liberación nacional es la trazada por María Corina Machado con la “Ruta del Coraje”.
Le hizo un llamado a todas las fuerzas democráticas del país para que “dejen la candidez insensata” y comprendan que si siguen creyendo en diálogos el único resultado que tendremos serán “decenas de plazas con estatuas de Fidel y Raúl Castro riéndose de su ingenuidad”.
Pidió a los dirigentes venezolanos a “poner los pies en la tierra” y no seguir apostando a “diálogos ni cuentos chinos”.
El parlamentario agregó que la crisis económica en el país es cada vez más aguda y el usurpador no podrá sortear la tempestad de las sanciones económicas.
Se refirió al Banco Central de Venezuela (BCV) al indicar que la institución es “una caja negra”.
Ni el Fondo Monetario Internacional -continuó- ni ningún organismo nacional e internacional, pueden creer las cifras que hace públicas el BCV, porque todos los datos que expresan están manipulados y buscan una intencionalidad meramente política.
Nota de prensa