No te preocupes, no todas estamos informadas de las relaciones modernas y lo mucho que influyen en la sexualidad. ¿Alguna vez has escuchado sobre el sexo vainilla? En este artículo te diremos qué es y cómo practicarlo, tal vez ya lo has hecho varias veces y tú ni en cuenta.
Por Soy Carmín
¿Qué es lo primero que se te viene a la mente? Seguro, lo asocias con el líquido de vainilla e incluso un vaso de leche. Esta vez vamos a citar un capítulo del libro Ganas de ti, escrito por la terapeuta sexual, Maria Tesler. En el que uno de los personajes, una mujer confundida le pregunta a su terapeuta, ¿qué demonios es eso del sexo vainilla? Sin saber, que muchas veces lo había tenido.
Para empezar, el sexo vainilla tiene su raíz en la comunidad Bondage Sadomasoquista. ¿Qué es el sexo vainilla? Un clásico, discreto pero exquisito sabor. Bueno, de la misma manera ven el sexo, para ellos el sexo vainilla resulta un tanto aburrido e insípido.
Esto quiere decir que estamos hablando de lo típico, seguro la posición sexual del misionero ya inundó tu mente. Sí, se trata de un sexo suave, relajado, sin muchas exigencias, es solo un encuentro en el que se busca la comodidad y nunca exponer a la pareja.
Cabe señalar, que el hecho de que sea más suave, no significa que no es placentero, es solo que hay personas que requieren más intensidad para alcanzar el placer. Es decir, algo como el uso de antifaces, lubricantes, aceites aromáticas, esposas y hasta látigos. Todo eso, no tiene nada que ver con el sexo vainilla.
El sexo vainilla, argumenta que no necesita arneses, látigos ni ningún tipo de juguete erótico. Mientras haya atracción verdadera, el roce de los cuerpos es suficiente para alcanzar un orgasmo tras otro. Es decir, el sexo vainilla, te invita a analizar el vínculo entre la pareja.