Rusia rechazó en la ONU este jueves la decisión del secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, de investigar la destrucción y el daño sufridos por instalaciones civiles y otras apoyadas por el organismo multilateral en la ofensiva del Gobierno sirio con apoyo ruso contra la provincia de Idlib.
“Lamentamos este paso, hablando con franqueza”, dijo el representante permanente adjunto de Rusia ante Naciones Unidas, Dmitry Polyanskiy, que calificó la decisión de António Guterres de “error”.
Según Polyanskiy la creación de un grupo para investigar estos incidentes responde a “presiones de países que realmente no quieren llevar la paz a Siria”
“Tenemos muchas dudas e interrogantes” sobre si hay razones legales para llevar a cabo la investigación, dijo el representante ruso, que agregó que aún no tenía los suficientes detalles para ahondar en una respuesta.
Lo que sí afirmó es que esta investigación se lanza con base en “noticias inventadas” y acusó a la ONG conocida como los “cascos blancos” que opera en Siria de no ser creíble.
“Nosotros hemos aportado datos y creemos que las fuentes de esa información deben ser creíbles”, declaró antes de sugerir que el objetivo de la investigación no es otro que acusar a Siria y a Rusia.
“Esto no es para una investigación, esto es para acusar a Siria y Rusia de cosas que no hemos hecho”, declaró ante los periodistas acreditados en Naciones Unidas.
“El secretario general, bajo la autoridad conferida en el artículo 97 de la Carta, ha decidido establecer un grupo de investigación interno de la sede de la ONU para investigar una serie de incidentes que han ocurrido en el noroeste de Siria”, anunció esta mañana el portavoz de Guterres, Stéphane Dujarric, en un breve comunicado.
Las fuerzas leales al presidente sirio, Bachar al Asad, con apoyo de Rusia han incrementado sus operaciones en el noroeste del país desde finales de abril, cuando comenzaron una ofensiva no declarada y una escalada de los combates en la zona desmilitarizada acordada por turcos y rusos en septiembre del año pasado.
En concreto, “la investigación cubrirá la destrucción o los daños a las instalaciones” situadas en la lista de zonas incluidas en dicho acuerdo y en las “instalaciones apoyadas por la ONU en el área”, según apuntó Dujarric.
EFE.