El interés de Estados Unidos por Groenlandia no es nuevo

El interés de Estados Unidos por Groenlandia no es nuevo

Foto: Archivo

 

 

El interés de Donald Trump por comprar Groenlandia fue recibido con desdén, pero es solo una continuación de la larga tradición estadounidense de expandir sus fronteras comprando tierras de otros países.





Washington se mostró interesado en comprar Groenlandia dos veces antes, a finales de la década de 1860 y en 1946, cuando el secretario de Estado James Byrnes planteó la idea a un funcionario danés en una reunión de la ONU en Nueva York.

Desde principios del siglo XIX, Washington compró territorio de Rusia, España, Francia y Dinamarca.

– La compra de Luisiana (1803) –

Estados Unidos compró Luisiana a Francia en 1803. Fue considerada la ganga del siglo, ya que por solo 15 millones de dólares obtuvo 2,2 millones de kilómetros cuadrados de pradera, montaña y el delta del Misisipi, una extensión que constituye casi una cuarta parte de su territorio actual.

– Florida (1819) –

Florida fue colonia española desde 1565 hasta que los británicos la adquirieron mediante el primer Tratado de París, en 1763. Fue devuelta a España en 1783.

No hizo falta intercambio de dinero para que el ministro español Luis de Onís y el secretario de Estado de Estados Unidos, John Quincy Adams firmaran el Tratado de compra de Florida en 1819. Fue admitido en la Unión como un estado esclavo en 1845.

– Alaska (1867) –

Alaska fue una colonia remota del imperio ruso que exportó principalmente pescado y pieles durante la mayor parte del siglo XIX.

En 1859 Rusia perdió interés por los 1,7 millones de kilómetros cuadrados de la tierra del Círculo Ártico, pero quiso alejarla del imperio británico, que controlaba Canadá.

El secretario de Estado William Seward supervisó su compra por 7,2 millones en 1867. Los estadounidenses lo consideraron una “locura de Seward”, pero finalmente reconocieron el potencial de Alaska como productor de petróleo y gas.

– Filipinas (1898) –

Estados Unidos comenzó a ser una potencia colonial el 10 de diciembre de 1898, cuando compró Filipinas a España por 20 millones de dólares e instaló un gobierno militar.

Washington aprobó la Ley de Independencia de Filipinas en 1934. Los japoneses ocuparon el territorio durante la Segunda Guerra Mundial, pero Estados Unidos y el ejército de la Commonwealth filipina lo recuperaron en 1945 y, un año más tarde, Estados Unidos reconoció formalmente su independencia.

– Islas Vírgenes (1917) –

Groenlandia no sería el primer territorio que Estados Unidos compre a Dinamarca. Washington adquirió las Indias Occidentales Danesas en 1917 por USD 25 millones y las llamó Islas Vírgenes de Estados Unidos.

Actualmente son una de las numerosas “áreas insulares” de Estados Unidos que no forman parte de los 50 estados ni distritos federales.

– Bahía de Guantánamo –

La bahía de Guantánamo es uno de los “territorios dependientes” de Estados Unidos en el Océano Pacífico y el Caribe. Fue arrendado como estación de carga y base naval en 1903 por 2.000 dólares en oro por año y elevado a 4.085 dólares en 1974.

Desde la revolución de 1959, el gobierno cubano alega que la compra fue impuesta por la fuerza y contra el derecho internacional.

Desde 2002, alberga el centro de detención de presuntos militantes capturados durante la “guerra contra el terrorismo”, condenado internacionalmente por presuntas torturas a los presos.

AFP