Para el alcalde de Caracas en el exilio, Antonio Ledezma, “es hora de pasar de la retórica a los hechos concretos, ya no hacen falta otros análisis ni diagnósticos, sabemos lo que pasa y porqué pasan estas barbaridades, tampoco nos consuelan las resoluciones condenando las violaciones de derechos humanos, podemos hacer un museo de la historia de las torturas con esas narrativas y mensajes de pésame, pero con eso no remediamos la tragedia que nos martiriza, lo que necesitamos en Venezuela son acciones concretas y efectivas”, asegura Ledezma, al momento de “exigirle a Juan Guaidó que tome las decisiones, que ordene, de una vez por todas, presentar formalmente en la OEA, la aplicación del artículo 8 del TIAR, porqué es más que evidente que Venezuela se ha convertido en “el patio trasero de la narcoguerilla colombiana”, que es más que cierto que es un mero centro de operaciones del terrorismo internacional encarnado por las células de Hezbolá y que las bandas criminales, que son más de 18 mil, operan a sus anchas en todo el territorio nacional que ha sido “somalizado’ de una mera brutal”, sentenció el lider de la oposición en el exilio Antonio Ledezma.
¿Qué más hace falta para que se concrete la Intervención Humanitaria que usted ha venido planteando desde hace ya muchos meses?
-Que la dirección política del país, obligada a velar por el mejor destino de Venezuela, tome las decisiones oportunamente, las correctas, que no es ni dialogar ni embelesarse con eventuales elecciones, aquí lo que hace falta es que se de un paso definitivo emplazando a la comunidad internacional y a sus órganos, como la OEA o la ONU, a que activen sus dispositivos, que no pueden ser “monumentos a la indiferencia”, como ha ocurrido hasta hora, salvo la diligente e inolvidable solidaridad de Luis Almagro.
¿Qué dispositivos son esos?
En la ONU, el Concepto de Responsabilidad de Proteger conocido como el R2P, partiendo del hecho cierto que el régimen de Maduro viola de manera sistemática y masiva los derechos humanos, que se cometieron entre los años 2017, 2018 y 2019 más de 7 mil ejecuciones extrajudiciales, además, está más que comprobado que ese régimen no está en capacidad de satisfacer las necesidades de alimentación, de salud y de seguridad personal a los venezolanos, que aún quedan dentro del territorio nacional, porque la verdad es que más de 5 millones han tennido que huir, espantados por la catástrofe humanitaria que no se resolverá hasta que Maduro no sea expulsado del poder que usurpa.
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El otro dispositivo es el TIAR, su artículo 8, porque también es indiscutible que Venezuela está amenazada por grupos irregulares, “la guinda que le faltaba a la calamidad” es la descarada presencia de los capos de la FARC que son protegidos en territorio venezolano, no solo para agredir a los venezolanos, sino que son una amenaza para la estabilidad y la paz del hemisferio.
¿Qué espera del equipo designado por el Presidente interino Juan Guaidó?
Que actúen, que no se siga perdiendo el tiempo, ya estamos en septiembre y Maduro sigue allí, en el trono de Miraflores, destruyendo a Venezuela, exijo que se actúe, sin vacilaciones, sin titubeos, que se corrijan los errores, que no se le de más oxígeno a esta narcotiranía con más diálogos postizos como ese noveno en la lista, el de Oslo y Barbados.
¿Qué piensa de lo que ocurre ahora en Colombia?
Que nada será superado como lo deseamos, hasta que no salgamos aquí de Maduro, porque eso es una corporación criminal internacional, que se apoyan entre sí, por lo tanto, si se aspira la paz para Colombia y la tranquilidad para Brasil, se debe estar muy claro que mientras la narcotiranía sobreviva en Venezuela, no habrá ni paz en Colombia ni seguridad en Brasil.
¿Qué relación hay entre Maduro y las FARC?
-Los añejos vínculos de esos factores que falsificaron las ideas ubicadas en la tradicional izquierda, que se apoyan en cartillas para desarrollar simulaciones, mientras se secuestran personas para extorsionarlas, matan ciudadanos en nombre de una falsa revolución y trafican drogas y armas. No podemos olvidar lo que pasó en la frontera con Ecuador, donde le dieron de baja a Raúl Reyes, un comandante de la FARC y de ese evento se desprendieron muchas pruebas aparecidas en una computadora incautada a los guerrilleros, entre muchas, las que vinculaban estrechamente a Hugo Chávez con la narcoguerrilla, tal como se infiere de los textos atribuidos a los “comandantes alias Mauricio y alias Jorge”, o sea que las operaciones coordinadas entre el secretariado de las FARC y Chávez, existían y han proseguido con Maduro.
Con información de Nota de Prensa