‘Roxy’, como la llaman sus amigos, siempre fue muy extrovertida, acostumbraba a vestir bien y se desplazaba en modernos vehículos. Sin embargo, esta joven venezolana –de 25 años– escondía un oscuro pasado y un aterrador presente: asesinó a una mujer en su país y en el Perú la sindican como una de las presuntas implicadas en el descuartizamiento de dos jóvenes en San Martín de Porres.
Por peru21.pe
Ella es Verónica Andreina Montoya Araujo, una expolicía venezolana que ingresó al Perú hace algunos meses –al parecer– con una identidad falsa.
Y es que la extranjera tenía una orden de captura internacional por el mencionado asesinato en su país, que cometió en setiembre de 2018.
Agentes de la División de Investigación de Homicidios le seguían los pasos, pues se sabía de sus vínculos con una red de proxenetismo que opera, principalmente, en distritos de Lima Norte.
La madrugada de ayer la atraparon en una discoteca de la cuadra 15 de la avenida La Marina, en Pueblo Libre.
Según una nota de prensa de la Policía Nacional, se trata de una presunta implicada en el asesinato y descuartizamiento del venezolano Rubén Matamoros (22) y el peruano Jafet Torrico (24), ocurrido el 9 de setiembre en el hostal Señor de Sipán, en Fiori.
Este sector, según la Policía, se encontraba tomado por una mafia de proxenetismo. Varios de los hostales eran ocupados por ciudadanos venezolanos, quienes también estaban vinculados a la venta de droga.
SABÍA QUE
– La noche del viernes, la Policía reconstruyó la ruta que siguieron los asesinos para deshacerse de los cadáveres. El taxista que los llevó contó detalles a los detectives.
– En tanto, en la misma zona, en la madrugada, se realizó un operativo en el que se intervino a 161 venezolanos.