La lanzadora de bala venezolana Ahymará Espinoza quedó eliminada este miércoles en la ronda de clasificación de su prueba en el Mundial de Doha al finalizar en 27º y último lugar en la ronda de clasificación, tras lo cual pidió ayuda para encontrar un entrenador antes de los Juegos Olímpicos de Tokio-2020.
Espinoza, de 34 años, recibía ayudas oficiales y federativas hasta 2016, que le permitían pasar una parte del año en Eslovenia con un especialista en lanzamientos, pero desde entonces entrena sola en Venezuela.
En el Mundial, consiguió una distancia válida (16,89 metros). Sus otros dos intentos fueron nulos.
“No me fue bien. Tengo fallas en la técnica porque estoy entrenando sola, no tengo entrenador. Me cuesta mucho mejorar. A seguir trabajando y a tratar de encontrar un entrenador que me ayude a mejorar y a entrenar para Tokio”, afirmó Espinoza a la AFP en la capital catarí.
“Yo vivo en Venezuela, en la zona de la costa. Es un pueblo y una provincia en la que lamentablemente no tenemos entrenadores allá y mucho menos de lanzamiento. Desde 2016 me toca trabajar sola y he ido en declive”, señaló.
Espinoza siente que la crisis económica y social que vive Venezuela afectó negativamente en su carrera por la falta de fondos para programas de desarrollo deportivo.
“La situación del país influye. Yo entrenaba en Eslovenia. Venezuela me apoyaba para ir allá y me iba muy bien. Pero 2016 no he viajado más nunca, me toca trabajar sola, pero seguiré luchando por mi sueño”, afirmó.
AFP