Irán prometió este sábado que responderá al ataque registrado el viernes contra uno de sus petroleros frente a la costa de Arabia Saudita, mientras que Riad aseguró que hubiese podido ayudar a la tripulación.
Ali Shamjani, secretario del Consejo Supremo de Seguridad Nacional, afirmó a la agencia semioficial ISNA que se aclararon algunas pistas sobre quién urdió lo que él llamó “ataque con misil” contra el buque “Sabiti”.
“La piratería marítima y la maldad en zonas de aprovechamiento marítimo internacionales (…) no quedará sin respuesta”, afirmó, citado por Isna.
“Al revisar los videos disponibles y las pruebas reunidas por los servicios de inteligencia, las primeras pistas sobre la peligrosa aventura de atacar a un petrolero iraní en el Mar Rojo quedaron al descubierto”, añadió.
Shamjani advirtió que la inseguridad en aguas internacionales entraña “riesgos perturbadores” para la economía global.
La National Iranian Tanker Company, propietaria del “Sabiti”, afirmó que el casco del barco registró dos explosiones separadas el viernes frente al puerto saudita de Yeda, aunque desmintió la información que indicaba que el ataque tuvo origen en territorio saudí.
Por su parte, Arabia Saudita afirmó que estaba dispuesta a prestar asistencia al petrolero iraní tras recibir un mensaje de su capitán, confirmó la agencia oficial de noticias SPA.
Las autoridades sauditas estaban dispuestas a “prestar toda la asistencia necesaria”, pero el buque “cerró su sistema automático de identificación y no respondió a las llamadas” de las autoridades sauditas, declaró el portavoz de la Dirección General de la Guardia de Fronteras, citado por SPA.
El incidente provocó fugas de crudo en el Mar Rojo, indicó la NITC.
Se trata del último de una larga serie de incidentes en esta región del mundo sacudida por conflictos, especialmente tras unos ataques ocurridos en Arabia Saudita, la aprehensión de petroleros en el Golfo y la destrucción de un dron estadounidense por parte de Teherán.
En septiembre, Arabia Saudita y Estados Unidos, y después Alemania, Reino Unido y Francia, acusaron a Irán de ser responsable de unos ataques aéreos contra dos yacimientos petroleros estratégicos en el este de Arabia Saudita, que provocó un breve aumento de los precios del crudo de un 20%.
Teherán negó cualquier implicación en estos ataques, reivindicados por los rebeldes hutíes de Yemen, que reciben el apoyo de Irán y combaten contra una coalición militar liderada por Riad. AFP