El 21 de septiembre integrantes de la familia Ramírez se disponían a cocinar. Al intentar encender la cocina vieron que no tenían gas, por lo que procedieron a cambiar la bombona. Se trataba de un procedimiento sencillo que habían realizado cientos de veces: consistía en cambiar la bombona quitando la válvula de presión. Cuando colocaron el conector con la bombona nueva, vieron que el cilindro comenzó a cubrirse de escarcha.
Por Carlos D’ Hoy / El Universal
No tuvieron tiempo de nada, de pronto una explosión sacudió la vivienda ubicada en el primer Plan de La Silsa. Una pared se derrumbó, el techo quedó destruido y cuatro integrantes del grupo estaban gravemente heridos. Con el pasar de las semanas tres de ellos, incluídos un niño de 12 años, morirían.
En los últimos tres años al menos 50 personas han resultado muertas en todo el país como consecuencia de explosiones de bombonas o por fugas de gas doméstico de acuerdo a un arqueo realizado por El Universal en medios de comunicación e Internet.
La historia se ha repetido en casi todo el país. Siniestros similares han ocurrido en los estados Bolívar, Zulia, Trujillo, Mérida, Táchira, Aragua, Carabobo, Apure, Distrito Capital, Miranda, Amazonas y Cojedes, y la cifra de muertes se acumula sin que las autoridades anuncien medidas al respecto.
Incendiario y explosivo
El Estudio Nacional de Incendios en Hogares de Venezuela, elaborado por la Asociación Venezolana para la Prevención de Accidentes y Enfermedades (Avepae), detectó que el gas doméstico es la segunda causa de incendios de viviendas en Venezuela, antecedido por las fallas en el sistema eléctrico.
El estudio de Avepae señala que entre 2013 y 2015 se produjeron 41 incendios en viviendas que arrojaron 56 víctimas mortales. De ellas 48 eran niños o adultos mayores.
Pero en el período comprendido entre 2017 y 2018 el número de siniestros fue de 40, casi la misma cantidad que en dos años.
En 2019 han ocurrido 35 siniestros vinculados al gas.
Los “accidentes” arrojaron al menos 50 decesos y 85 heridos de acuerdo a conteo periodístico en ese período.
De estas explosiones 35 ocurrieron en inmuebles, tres de produjeron en camiones dedicados al transporte de gas, dos en vehículos particulares y uno ocurrió en una planta de llenado.
Fallas en bombonas
Estos hechos reflejan que más allá de accidentes fortuitos y sabotajes podríamos estar ante fallas provocadas por la falta de mantenimiento de bombonas, válvulas y conectores.
Además meses atrás se reportó que en el país no hay mercatano, el químico que produce el característico olor del gas. Sin ese aditivo las fugas son imperceptibles.
Si esto fuese poco tambiérn han sido detectadas fallas en la operación de llenado. La sobrecarga de cilindros por falta de equipos especializados provoca que las explosiones de las bombonas sean más intensas.
Bomberos alerta
Cada vez que ocurre un incendio los investigadores de siniestros buscan determinar si las explosiones fueron accidentales o consecuencia de imprudencia, impericia u omisión por parte de usuarios y operadores o si son por falta de mantenimiento a los cilindros. También se verifica el cumplimiento de la normativa Covenin.
“Nos preocupa que no se esté realizando el mantenimiento rutinario a las bombonas, cada dos años tal como lo establece la ley”, señaló un jefe bomberil, quien pidió que su identidad fuese resguardada.
Un trabajador de Pdvsa Gas aseguró que la falta de mantenimiento de los cilindros se ve en la calle: “todas las bombonas están oxidadas, golpeadas, no se ven bombonas nuevas. Las venden con fugas y la gente no se da cuenta de eso porque no siente el olor, pero tantas explosiones evidencian la gravedad de este asunto”.