Todo luchador experimentado sabe que no es la masa y ni la fuerza del golpe, el resultado de la pelea se decide por el golpe exacto y técnicamente correcto. Un golpe rápido y preciso, aplicado en el punto deseado será diez veces más peligroso que diez golpes fuertes en cualquier lugar.
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Traducción libre por lapatilla.com
Es por esta razón que los boxeadores experimentados nunca se preocupan y no gastan su energía en ataques imprudentes e imprecisos. Un luchador competente siempre sabe dónde y lo más importante cuándo vencer.
Entiende perfectamente la anatomía del cuerpo humano y solo apunta a esos puntos, un golpe ligero que le quite la oportunidad de continuar la batalla. En este artículo, responderemos a la pregunta de cada luchador novato: ¿dónde necesitas golpear para que sea decisivo?
El lugar más vulnerable para el oponente es la barbilla. Un golpe preciso en la barba con un 100% de probabilidad enviará al oponente a un nocaut. ¿Pero por qué está pasando esto?
El cerebro humano está ubicado en la parte superior de su cráneo, y la barbilla está en la parte inferior. Se sabe que el cerebro humano es muy frágil. Incluso un pequeño golpe en la cabeza lo expone al daño permanente. El mentón se encuentra en la dirección diametralmente opuesta del cerebro y es una palanca, con la cual puede mover fácilmente el cerebro desde su eje habitual.
Incluso si solo intentas sacudir la cabeza bruscamente en diferentes direcciones, puedes sentir que algo extremadamente incómodo.
Un golpe fallido pondrá en movimiento todo el cráneo. Las paredes del cráneo comenzarán un cambio brusco hacia un lado, y el cerebro permanecerá en su lugar.
Entonces, la “inercia” hará que su cerebro indefenso “siga la corriente” pero se quedará atrás y comenzará a golpear contra las paredes protectoras.
Esto provocará un microdesplazamiento múltiple hacia los lados con una interrupción de la circulación del líquido cefalorraquídeo.
En pocas palabras: conmoción cerebral.
El “cerebro” comenzará una función protectora, en otras palabras, un reinicio, en ese momento la persona perderá la conciencia.
Pero si el cerebro está ocupado “reiniciando” y no tiene tiempo para tomar la protección necesaria en el segundo golpe, la persona puede caer en coma. La mayoría de las veces, esto ocurre cuando cae en un estado de nocaut.
Resumiendo: La barbilla es el punto, con un buen golpe el oponente no tendrá la oportunidad de continuar la batalla.