La diputada a la Asamblea Nacional (AN), Manuela Bolívar, señaló este martes que trata de tener mayor balance entre la familia y el país, “pero siempre hay cosas que me pierdo. No sé si mi familia lo va a entender pero quiero dejarles un país distinto”, según lo reseñado de Sumarium.
Asimismo, indicó en una entrevista con la periodista Shirley Varnagy, transmitida por el Circuito Onda La Superestación, que su decisión “no es irme, a mi me gusta ayudar a mi gente, pero quedarse significa echar para adelante”.
“Mi mamá y mi papá se divorciaron cuando yo estaba muy pequeña. Los hijos de padres divorciados tenemos una dinámica distinta. Yo soy lo que soy por el empuje de mi mamá“, sumó.
Sostuvo que “la política me ha separado de mi papá. Yo aspiro que podamos estar en un país en donde aún cuando se piense distinto no se tenga que cortar comunicación por motivos de seguridad“.
Vivir distinto
La parlamentaria acotó que “el pueblo venezolano es muy trabajador, pero necesita esa libertad para poder trabajar y emprender. No debemos olvidar nuestra esencia“.
“La lucha no sólo la dirigen los partidos políticos sino también todos los ciudadanos que hoy quieren vivir distinto. Necesitamos recomponer nuestras piezas como sociedad para poder renacer“, agregó.
Dijo que hay momentos donde “me he sentido triste y donde he sentido angustia, pero nunca me he sentido derrotada. La valentía no significa no tener miedo sino sentir miedo y reinventarse, en ese sentido, el partido Voluntad Popular sigue de pie”.
“Es totalmente obvio que lo que pasó el día viernes en la sede de Voluntad Popular es orquestado por el régimen. Hoy ante la crisis y el dolor, lo primero es la familia y por la familia se hace lo que sea“, destacó.
Manifestó que “es ese tejido familiar en donde está el sentido y la resistencia para continuar. Hay dos elecciones: perdonamos o nos dejamos consumir por el dolor. El perdón es duro pero necesario“.