Un traficante de personas le ofreció a Jesús, hondureño de 26 años, “el paquete”: entre 3.000 y 6.000 dólares por llevar a un menor de edad y un adulto hasta un agente de la Patrulla Fronteriza en Estados Unidos.
Por TeleMundo
Jesús aceptó pagar 7.000 dólares al coyote, como se les conoce a estos traficantes, para que los cruzara a su esposa, su hija de 4 años y a él. A cambio, el coyote le prometió que su familia viajaría en autobuses de lujo con comida incluida.
La promesa resultó una mentira: una vez que llegaron al sur de México, fueron transportados en un tráiler junto con 150 migrantes. Fueron obligados a dormir en el piso de bodegas junto a otras 500 personas y a solo comer paquetes de galletas.
“Arriesgué a mi hija porque me dijeron que no íbamos a sufrir, que íbamos a venir bien, comiendo bien, pero todo fue una mentira”, dijo Jesús. “Ya en el camino la realidad es otra”.