La mujer está acusada de inyectarle a su “cliente” una sustancia desconocida que le provocó severos daños en su salud.
Por: Miami Mundo
Gómez, de 55 años, está acusada de practicar medicina sin licencia, pues según las autoridades el primero de junio de 2018 llegó a casa de una paciente de Hialeah y le practicó un procedimiento de inyección para aumentar el tamaño de su trasero.
La víctima declaró en el reporte a la policía que la acusada le cobró 2 mil dólares por el procedimiento, pero que poco después comenzó a sufrir de fiebre, dolores y molestias en el área donde le había inyectado.
Tras ir a su médico y ser remitida a un cirujano plástico, la víctima inició un proceso para revertir el daño que le había dejado las inyecciones en su cuerpo que ahora se encontraba desfigurado, pues la sustancia estaba regada por los músculos del trasero que debieron ser reconstruidos.
Tras dos intervenciones quirúrgicas por un valor de 20 mil dólares y una aparente recuperación, fue la misma paciente la que hizo la demanda del caso el pasado 21 de enero.