Bélgica, que debe pronunciarse sobre la entrega a España de un rapero condenado por apología del terrorismo, debe valorar el código penal vigente cuando ocurrieron los hechos, falló este martes la justicia europea, algo que podría complicar su extradición.
El rapero Valtonyc, nombre artístico de José Miguel Arenas Beltrán, fue condenado en 2017 a dos años de prisión por enaltecimiento de la banda separatista vasca ETA, a un año por injurias al rey y a seis meses por amenazas en canciones suyas de 2012 y 2013.
Antes de entrar en prisión en mayo de 2018, el músico se marchó a Bélgica. La justicia española emitió entonces una Orden Europea de Detención y Entrega (OEDE) contra él en la que optó por la vía rápida para conseguir su extradición.
España marcó así la casilla de “terrorismo” en la lista de los delitos reconocidos por los 27 países de la Unión Europea (UE), pero para, poder hacerlo por esta vía, el delito debía estar penado con una pena de al menos tres años de prisión.
Esa era la condena máxima vigente en el momento de la demanda de extradición, pero no en el Código Penal vigente en el momento en que se cometieron los hechos y por el que se condenó a Valtonyc a dos años de prisión por apología del terrorismo.
Ante las dudas sobre qué Código Penal tener en cuenta, la justicia belga preguntó al alto tribunal europeo. “Los tribunales deben tener en cuenta la duración de la pena prevista por la ley española aplicable a los hechos cometidos”, indicó este martes.
El TJUE descarta así la vía rápida para el caso de Valtonyc, por lo que el tribunal de apelación de Gante (noroeste de Bélgica) podrá entrar directamente a valorar si los hechos por los que se condenó al músico son también delito en Bélgica.
“Tenemos el buen presentimiento de que esta victoria provisional nos llevará a una victoria final y que no habrá extradición”, dijo a la AFP el abogado del músico, Simon Bekaert. La próxima vista en el tribunal de apelación belga está prevista el 24 de marzo.
En septiembre de 2018, el tribunal de primera instancia de Gante rechazó ejecutar la euroorden, al considerar que los hechos por los que fue condenado no eran delito en Bélgica. “Esto es libertad de expresión”, dijo entonces uno de sus abogados.
Su caso no es aislado. Internautas y artistas han sido condenados por mensajes considerados como apología del terrorismo, en virtud de una ley antiterrorista que se usa para “reprimir expresiones de índole política” en las redes sociales, según Amnistía Internacional.
A finales de febrero, el Tribunal de Constitucional español anuló una sentencia contra el músico español César Strawberry por apología de terrorismo en unos tuits, al considerar que se le vulneró la libertad de expresión.
AFP