Después de un mes detenido en la Asociación Especializada de la Policía de Asunción, Ronaldinho y su hermano Rodrigo Assis de Moreira, consiguieron el beneficio de la prisión domiciliaria en la causa en la que son investigados por haber ingresado a Paraguay con documentación falsa. Para ello, el ex astro del Barcelona, de 40 años, pagó una fianza de 1.600.000 dólares.
“Corresponde la medida sustitutiva para Ronaldinho y su hermano y la continuación de su arresto en un hotel. Tengo la constancia de la aceptación de los directivos del hotel para que ellos a su costa guarden arresto domiciliario allí”, dijo el magistrado Gustavo Amarilla en conferencia de prensa, luego de haber tomado la decisión en una teleconferencia de la que participó el propio Dinho desde su lugar de reclusión.
El fantasista surgido de Gremio de Porto Alegre fijó como lugar de residencia en las habitaciones 104 y 105 del exclusivo hotel Palmaroga, situado en la emblemática Calle Palma, entre Montevideo y Ayolas, en Asunción. Los hermanos Asis de Moreira son los únicos huéspedes del hotel, dadas las medidas de emergencia tomadas por el gobierno paraguayo por la crisis del coronavirus. Ocupan el primer piso, donde están las habitaciones de mayor lujo. Dinho se quedó con la suite presidencial.
Una habitación standard cuesta entre 80 y 90 dólares la noche. El espacio elegido por el campeón del Mundial de Corea y Japón 2002 tiene un valor de 380 dólares por jornada.
Ahora bien, ¿cuál fue la ruta del dinero que resultó la llave para que el ex futbolista pueda aguardar el final de la investigación (que puede demorar seis meses) fuera de la cárcel? Ronaldinho apeló a una cuenta que tenía en Europa. Desde allí transfirió el dinero a uno de sus abogados. Y su apoderado lo derivó al Banco Nacional de Fomento, donde llegó a manos del Estado paraguayo, según explicó el juez Amarilla.
¿Por qué tuvo que buscar Dinho en el dinero que tenía disponible en el Viejo Continente? Porque en el pasado cercano tuvo problemas con sus cuentas en Brasil. Ronaldinho y su hermano habían sido condenados en 2015 por la construcción de una plataforma de pesca y una estructura para atracar barcos en el lago Guaíba, en Porto Alegre, capital del estado de Río Grande do Sul. La región es considerada un área de preservación ambiental y ellos no tenían licencia cuando iniciaron el proyecto.
En consecuencia, le impusieron el pago de una multa de 8,5 millones de reales (USD 2,3 millones) y que no ha sido saldada hasta el momento. En noviembre de 2018, la Fiscalía intervino en sus cuentas bancarias y encontró apenas 6,61 dólares.
Acto seguido, el juez del Tribunal de Justicia de Rio Grande do Sul le prohibió la salida y ordenando la anulación de su pasaporte. Tiempo después, el futbolista llegó a un arreglo y abonó su pena para recuperar la documentación. Pero tomó precauciones extra con su economía dentro del territorio brasileño.