Donald Trump presumió durante las primarias del Partido Republicano, en 2016, de que podría plantarse «en mitad de la Quinta Avenida y disparar a la gente, y no perdería votantes». Algo parecido le ocurre al presidente Pedro Sánchez, arropado por su asesor de imagen Iván Redondo.
Por M. A. Ruiz Coll | OKdiario.com
La crisis del coronavirus pasa factura al PSOE, pero de momento no supone, con más de 24.500 muertos, una debacle para el Gobierno de Pedro Sánchez y Pablo Iglesias. Según la primera oleada del sondeo elaborado por Hamalgama Métrica para OKDIARIO, el PSOE perdería hoy ocho escaños, mientras que el PP de Pablo Casado ganaría once diputados.
Pero este dato no implica por el momento un vuelco electoral. Mientras el PSOE cae, Podemos se recupera levemente y sube dos escaños. En cambio, los socios potenciales del PP retroceden: Vox perdería un escaño y Ciudadanos (Cs) tres.
De este modo, el bloque constitucionalista de centro derecha (PP, Vox, Ciudadanos y Navarra Suma) alcanzaría 160 escaños, frente a los 149 de la coalición de Gobierno formada por PSOE y Podemos, que aún podría buscar apoyos en los partidos minoritarios para intentar alcanzar la mayoría absoluta. Aunque la crisis del coronavirus ha abierto un abismo entre el Ejecutivo de Sánchez y los independentistas catalanes.
La prioridad de Sánchez, la propaganda
Según el sondeo, el PSOE se mantendría hoy como el partido más votado, aunque pierde 1’2 puntos de respaldo electoral: pasaría del 28% al 26,8%. Su representación en el Congreso caería de los 120 diputados actuales a 112. Con una estimación de 100 escaños (102 si se incluyen los de Navarra Suma), el PP acorta distancias y se queda a 10 escaños del PSOE.
La crisis del coronavirus ha demostrado que la principal habilidad de PSOE y Podemos no es gestionar una emergencia sanitaria con miles de muertos, sino manejar el aparato de propaganda. El Ministerio de Sanidad no realizó las primeras compras de material sanitario hasta el 17 de marzo, cuando ya había 491 muertos, ha gastado millones de euros en test defectuosos y ha empezado a repartir mascarillas con más de 18.000 muertos.
El Gobierno se ha mostrado más preocupado por cuidar su imagen y minimizar el coste electoral de la crisis. Con millones de personas encerradas en sus casas, Iván Redondo ha convertido La Moncloa en un plató de televisión, para tener una presencia permanente de Sánchez y sus ministros en todos los hogares. El Ministerio de Sanidad ha convertido en eslogan de sus campañas publicitarias las frases que Pedro Sánchez pronuncia en sus comparecencias televisivas: «Este virus lo paramos unidos».
El PSOE pierde ocho escaños, mientras su socio de Gobierno, Podemos, asoma la cabeza y recupera dos. El partido morado mejora su respaldo electoral pasando del 12,9% al 13,4%. De este modo, pasaría de sus 35 escaños actuales a 37. En conjunto, el actual pacto de Gobierno PSOE-Podemos sólo perdería seis escaños, aunque su mayoría en las Cortes ya es extremadamente frágil.
La lucha contra los «bulos»
El líder de Podemos, Pablo Iglesias, ha decidido convertir la crisis del coronavirus en una oportunidad para imponer su política de subsidios con el fin de comprar votos cautivos (ha ganado el pulso al ministro José Luis Escrivá para aprobar en mayo la renta mínima vital) y sus tesis totalitarias: un Gobierno obsesionado por controlar la libertad de información, con el pretexto de combatir los «bulos», y que ordena a la Guardia Civil «minimizar el clima contrario a la gestión del Gobierno» en las redes sociales, como ha confesado este domingo el general José Manuel Santiago.
El líder de la oposición, Pablo Casado, sale fortalecido de esta crisis, en la que ha mantenido una actitud de apoyo responsable al Gobierno para resolver la emergencia sanitaria, si bien en las últimas semanas ha elevado el tono de la crítica ante la catarata de errores cometidos por el Ejecutivo de Sánchez.
Según el sondeo de Hamalgama Métrica, el apoyo electoral del PP crece en casi dos puntos, al pasar del 20,8% en las últimas Elecciones al 22,7%. De este modo, su representación crecería de 89 a 100 escaños, lo que consolida al PP como la alternativa de Gobierno.
El partido de Casado logra aglutinar así el voto de centro derecha, por lo que sus socios del bloque constitucionalista retroceden levemente. Vox se mantiene como el tercer partido más votado, aunque según el sondeo perdería un escaño y se situaría en 51. El partido de Santiago Abascal ha sido con diferencia el que se ha mostrado más beligerante con la gestión del Gobierno y ha anunciado que estudia medidas judiciales contra el Consejo de Ministros por los miles de muertos de coronavirus.
Entre los partidos minoritarios apenas se producen cambios. A pesar de que la gestión de la crisis por parte de la Generalitat ha sido aún más calamitosa, los independentistas de ERC repiten con 13 escaños y Junts per Catalunya (JxCAT) mantiene ocho. Lo mismo ocurre con el PNV (seis escaños), Bildu (5), Más País de Íñigo Errejón (2) y Compromís (1). La CUP perdería uno de los dos escaños que obtuvo en las pasadas Elecciones Generales, Navarra Suma (PP+UPN+Cs) mantiene dos y el PRC de Miguel Ángel Revilla conserva el único que sacó.
Esta primera oleada de la encuesta de Hamalgama Métrica para OKDIARIO consta de 1.000 entrevistas telefónicas (tanto a móviles como a teléfonos fijos) realizadas entre el pasado martes, día 14, y el viernes 17 de abril. La selección de la muestra se ha realizado con criterios proporcionales respecto a los núcleos de población y grupos de sexo y edad. El sondeo tiene un margen de error del 3,16% y un grado de confianza del 95,5%.