Un pensionista murió después de rechazar el tratamiento para el coronavirus cuando descubrió que la enfermedad había matado a su esposa durante 63 años.
Por Mirror
Bill Dartnall de 90 años, se negó a usar su máscara de oxígeno después de que le dijeron que Mary de 81 años, había sucumbido a Covid-19.
La pareja, que había estado junta desde la década de 1950, murió el mismo día en el hospital.
La Sra. Dartnall, madre de dos hijos, que era apicultor, no respondió en su casa y se le dio positivo por coronavirus después de ser expulsado a A&E.
Su esposo sufrió un derrame cerebral unos días después y fue ingresado en el mismo hospital, donde también se descubrió que tenía el virus.
Desde entonces, sus muertes han sido una doble tragedia devastadora para las dos hijas de la pareja, Rosemary y Ann.
Rosemary dijo que “cuando le dijeron que mamá había fallecido, trató de quitarse la máscara de la cara y dejó en claro que no quería más oxígeno. Papá se negó a usar la máscara; no sabemos exactamente por qué, pero no quería continuar”.
Según el NHS Inglaterra, los pacientes tienen derecho a rechazar el tratamiento.
Su sitio web dice que “si rechaza un tratamiento, su decisión debe ser respetada, incluso si se cree que rechazar el tratamiento resultaría en su muerte”.