Manifestantes de una protesta contra el racismo evitaron que un sujeto deje unos explosivos en medio de la calle y los arrojaron de regreso a su auto, donde detonaron causando un gran estruendo.
Por: Infobae
La escena se registró en Riverdale, una ciudad de California, donde un grupo se manifestaba pacíficamente durante el día. Allí, un hombre blanco se bajó de un auto y dejó un artefacto que humeaba y mostraba señales de estar próximo a explotar.
Rápidamente las personas que estaban cerca se alejaron, pero otro arrojó el objeto dentro del vehículo, donde detonó con un gran estruendo. Las luces que emitió revelaron que se trataba de pirotecnia.
La persona, que no ha sido identificada, fue golpeada además por un grupo de manifestantes. Según explicaron los presentes, los explosivos muchas veces han sido confundidos con disparos, lo que desconcierta a los activistas y a los policías, que pueden pensar que se trata de un tiroteo y abrir fuego.
El vehículo se llenó de humo y las personas alrededor notaron que todavía había pasajeros dentro del auto, que salieron sin aparentes daños.
En redes sociales, el sujeto que intentó dejar la pirotecnia fue un punto de debate. Mientras los sectores que apoyan a Trump aseguraban que se trataba de un miembro del grupo Antifa, otros miembros identificados como liberales (término usado para referirse a los progresistas en inglés) llegaron a tildarlo de neonazi y de simpatizante del presidente, y aseguraron que buscaba causar caos en una marcha que hasta entonces se desarrollaba sin inconvenientes.
Estados Unidos lleva más de una semana de protestas a raíz de la muerte de George Floyd, quien fue asfixiado por la policía durante un arresto.
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