Adecuadas condiciones laborales y capacitación de mano de obra son las exigencias que hacen los trabajadores del sector construcción para retornar a sus puestos de trabajo como parte de la flexibilización de la cuarentena decretada por la pandemia del COVID-19.
Nota de prensa
El sector de la construcción fue uno de los 10 convocados a reiniciar actividades el 1° de junio como parte del esquema de flexibilización del confinamiento que desde el 17 de marzo mantiene a los venezolanos en sus casas y la economía paralizada.
“Pero para que la construcción empiece a dar resultados se necesita algo más que un llamado a comenzar labores entre 8:00 am y 1:00 pm, intersemanal, como el realizado por el régimen de Nicolás Maduro. Se requiere de condiciones laborales adecuadas y capacitación de mano de obra, ya que buena parte del personal obrero se fue con el éxodo venezolano de los últimos años”, señaló Linerby Sánchez, directora de Proyectos del Instituto de Altos Estudios Sindicales (Inaesin).
La escasez de agua, gasolina, medios de transporte y las recurrentes fallas eléctricas dificultan, por un lado, la asistencia continua a las obras y por el otro, están las precarias condiciones en las que se acude a trabajar en construcciones del sector público, en las que se incumple la Ley Orgánica de Prevención, Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo (Lopcymat), sin que se hagan los reparos correspondientes.
Desde 2019, por iniciativa del Inaesin, los sindicatos han venido realizando mesas de trabajo con la Cámara Venezolana de la Construcción para analizar en conjunto la situación del sector, y articular esfuerzos con miras a alcanzar acuerdos de productividad y así mantener empresas activas que garanticen el empleo y una mejor remuneración.
La construcción es uno de los sectores más duramente golpeados por las erradas políticas públicas que le ocasionaron una contracción de 95,5% entre el primer trimestre de 2014 y el primero de 2019, según cifras del Banco Central de Venezuela.
El área de la construcción es uno de los dinamizadores de la economía de un país, y en este caso evidencia el nivel de destrucción en el que se encuentra Venezuela, donde la infraestructura de servicios públicos ni la vialidad funcionan.
Después de dos meses y medio detenidos y en medio de la peor recesión sufrida por el sector, la construcción apenas se reactivó 25% la primera semana de junio, según cifras aportadas por Nicolás Maduro.
El Observatorio de Conflictividad Laboral y Gestión Sindical del Inaesin hará énfasis en el estudio de la problemática de este sector para continuar visibilizándola.
“Para comenzar a revertir la situación, el Inaesin hace un exhorto a las autoridades a atender las necesidades de los trabajadores del sector empezando por el rescate del Instituto Nacional de Capacitación y Educación Socialista (Inces), y cortar con la hiperinflación que reduce casi a nada la capacidad de compra del trabajador”, expresó Sánchez.