Los precios del petróleo subieron este lunes empujados por las bolsas a pesar de las preocupaciones de los inversorres sobre la evolución de la pandemia de coronavirus y el retorno de las medidas de confinamiento que afectan la demanda.
El barril de Brent del mar del Norte para entrega en agosto terminó en 41,71 dólares en Londres, en alza de 1,68% sobre el cierre del viernes.
En Nueva York el barril de WTI para igual entrega ganó 1,22% a 39,70 dólares.
La semana pasada el Brent bajó 2,8% y el WTI 3,2%.
Durante la jornada el petróleo se recuperó “impulsado por los mercados de acciones”, constató Craig Erlam, de Oanda.
Pero “el impulso está contenido, lo cual sugiere que el petróleo alcanzó su pico por el momento”, añadió.
El nivel ed 40 dólares “no es viable en la perspectiva de un retorno del confinamiento y de ciertas restricciones de movilidad en mercados importantes como Estados Unidos o Brasil”, destacó Louise Dickson, analista de Rystad Energy.
El mundo, confrontado desde diciembre a la pandemia de Covid-19, cruzó el domingo dos hitos: más de medio millón de muertos y diez millones de casos de esta enfermedad registrados.
Por otro lado, el grupo energético Chesapeake Energy, acorralado por el colapso de los precios del petróleo debido a la crisis sanitaria mundial, anunció que solicitó protección por bancarrota para poder emprender la reestructuración de su deuda de 7.000 millones de dólares.
Durante un tiempo líder estadounidense de la explotación de gas de esquisto, con operaciones que se extienden desde Texas hasta Pensilvania, el grupo dijo el domingo en un comunicado que no tenía otra opción que la reestructuración.
Según Ipek Ozkardeskaya, de Swissquote Bank, esta noticia es “buena para la reducción de la sobreoferta mundial de crudo, ya que el gigante del petróleo de esquisto es en parte responsable de la acumulación rápida de stocks mundiales desde hace años y tuvo un impacto negativo sobre los precios”.
AFP