La tasa de mortalidad de los pacientes de COVID-19 en cuidados intensivos ha disminuido en alrededor de un tercio desde el comienzo de la pandemia, debido al menos en parte a una mejor atención hospitalaria, según una revisión de los estudios publicados.
El análisis global de 24 estudios de observación de COVID-19, la enfermedad causada por el nuevo coronavirus, fue publicado el miércoles en la revista Anaesthesia. La investigación dirigida por Tim Cook, profesor de los Royal United Hospitals Bath en Reino Unido, concluyó que la tasa de mortalidad general de los pacientes de COVID-19 en las unidades de cuidados intensivos (UCI) ha disminuido de casi el 60% desde finales de marzo al 42% a finales de mayo. La tasa no fue significativamente diferente en Europa, Asia y América del Norte.
Los autores del estudio ofrecieron varias explicaciones, entre ellas “el rápido aprendizaje que se ha producido a escala mundial debido a la pronta publicación de los informes clínicos en las primeras etapas de la pandemia”. También sugirieron que las UCI de los hospitales podrían haber estado bajo una mayor presión al principio de la pandemia.
La rápida propagación del SARS-CoV-2, el alto número de casos y la proporción de pacientes que requieren soporte respiratorio impusieron una “demanda sin precedentes” en los servicios de UCI, escribieron los investigadores en un estudio publicado el miércoles en la revista Anesthesia. Los países en las fases posteriores de la pandemia ahora pueden estar manejándolo mejor, dijeron.
Médicos de todo el mundo han informado de que se han realizado progresos en el aprendizaje sobre el virus para comprender mejor los problemas fundamentales de muchos pacientes, aunque queda mucho por hacer en cuanto al desarrollo de tratamientos y vacunas preventivas.
Los autores enfatizaron que la reciente tasa de mortalidad en UCI de la enfermedad COVID-19, de alrededor del 40%, sigue siendo mucho más alta que el 22% de otras neumonías virales.
“Siendo optimistas, a medida que la pandemia progresa, podemos enfrentarnos mejor a la COVID-19”, dijeron.
La Organización Mundial de la Salud está recopilando datos de países para identificar elementos que reducen la mortalidad, con el objetivo de crear una caja de herramientas de tratamientos que permita a los médicos brindar una mejor atención a la gama completa de pacientes con Covid-19. El nuevo estudio se sumará al conocimiento acumulativo, dijo Sylvie Briand, directora de la OMS para la preparación mundial de riesgos infecciosos. “Esta es información crítica que nos ayudará a refinar nuestra estrategia para reducir la mortalidad”, explicó.
La revisión encontró que la mortalidad en la UCI no difiere significativamente entre las regiones, a pesar de las variaciones aparentes en los tratamientos y otras áreas, lo que sugiere que ninguna terapia específica ha reducido especialmente la mortalidad en la UCI, dijeron los autores en un comunicado. En junio, se descubrió que el antiinflamatorio económico dexametasona reduce las muertes en un tercio entre los pacientes que reciben ventilación mecánica, y existe esperanza de que esto mejore aún más la supervivencia, dijeron.
La enfermedad crítica asociada con el covid-19 puede prolongarse. Alrededor de una quinta parte de las hospitalizaciones en la UCI en el Reino Unido duró más de cuatro semanas, y el 9% persistió durante más de 42 días. La mortalidad en las UCI por covid-19 es casi el doble de la tasa típica del 22% para otras neumonías virales.
“Sin embargo, el mensaje importante es que a medida que la pandemia ha progresado y todos estos factores se combinan, la supervivencia de los pacientes admitidos en UCI con covid-19 ha mejorado significativamente”, explicaron los autores.