Asesinan a cinco cooperantes de ONG internacionales secuestrados en Nigeria

Asesinan a cinco cooperantes de ONG internacionales secuestrados en Nigeria

Captura del video difundido por grupos yihadistas del asesinato de 5 trabajadores humanitarios

 

Cinco cooperantes de ONG internacionales como Acción contra el Hambre y el Comité de Rescate Internacional (IRC) fueron asesinados tras haber sido secuestrados el mes pasado en el noreste de Nigeria, territorio donde opera el grupo yihadista Boko Haram, informaron las organizaciones.

“Acción contra el Hambre condena, en los términos más firmes, estos asesinatos”, dijo esta ONG en un comunicado emitido a última hora del miércoles, en el que informaba sobre el asesinato de Ishaku Yakubu, uno de sus trabajadores locales, y de otros cuatro cooperantes más.





Por su parte, el IRC informó de la muerte de Luka Filibus, uno de sus trabajadores que “dedicó su vida a proteger a los niños y ayudar a disminuir su trauma ante la crisis”, según recordó esta ONG en otro comunicado.

Los cooperantes no se encontraban de servicio cuando fueron secuestrados el pasado 8 de junio en el estado de Borno (noreste), pero aún así, cualquier secuestro de personal humanitario es una violación de las leyes internacionales.

Los cooperantes que trabajan en esta zona del país están expuestos a secuestros frecuentes y asesinatos, además de ataques de los yihadistas mientras intentan realizar su trabajo.

“Este asesinato injustificable refleja la inmensa dificultad que afrontan los actores humanitarios independientes e imparciales, y la violencia a la que estamos expuestos todos los días para cumplir nuestra misión”, consideró Acción contra el Hambre.

Solo en 2019, doce cooperantes perdieron la vida en Nigeria, y varios siguen en paradero desconocido, como la trabajadora de Acción Contra el Hambre Grace Taku, secuestrada desde julio de 2019; y de Alice Loksha, enfermera de Unicef raptada en una instalación militar en Borno en marzo de 2018.

Además, las ONG también reciben recurrentes acusaciones del Gobierno de ayudar a los yihadistas con sus operaciones, y varias de ellas han sido expulsadas del país.

Boko Haram fue creado en 2002 en la localidad de Maiduguri (noreste de Nigeria) por el líder espiritual Mohameh Yusuf, con el propósito de denunciar el abandono al que las autoridades habían sumido a un marginado y empobrecido norte del país.

En aquel momento, sólo efectuaba ataques contra la policía nigeriana, al representar al Estado, pero desde que Yusuf fue abatido por agentes en 2009 el grupo se radicalizó e inició una sangrienta campaña para imponer un Estado de corte islámico.

Desde entonces, el noreste de Nigeria -y en los últimos años las áreas de Camerún, Chad y Níger fronterizas a su vez con la cuenca del lago Chad- viven bajo una doble amenaza yihadista.

En la última década tanto Boko Haram, como más tarde su escisión el Estado Islámico en la provincia de África Occidental (ISWAP), han asesinado a más de 27.000 personas y desplazado de sus casas a cerca de tres millones, según datos de la ONU. EFE