El activista de Derechos Humanos Alfonzo Bolívar indicó que “intentan colocarle cronograma al hambre en el estado Miranda a través de un absurdo racionamiento de la compra por número de cédula, que traerá más colas y distorsiones en la economía e incomodidades a los venezolanos que viven al día, mientras, por otro lado el régimen abre un mega supermercado propiedad de iraníes llamado Megasis”.
“Venezuela en este momento padece la paralización de la producción petrolera, la destrucción de las hidroeléctricas y el sistema eléctrico nacional, la falta de medicinas, la escasez de gasolina, la falta de gas doméstico y todo los males de la gestión Chávez- Maduro. En medio de este caos llegó la pandemia del COVID-19, para ser utilizada por el régimen como el arma de la profundización del Socialismo”.
Bolívar aseveró que el cierre y control de los mercados populares “sólo es para tapar el hecho de que ya no hay producción de alimentos, los agricultores se vieron afectados por el impacto de la escasez de combustible. Producir y llevar la producción agrícola a las principales ciudades y centros de comercio es una tarea titánica en la que solo están perdiendo el agricultor y el ciudadano, mientras el régimen se mantiene consumiendo productos importados en conjunto al otro mínimo de la población que por vías inéditas logran recibir algún tipo de remesa o mantiene un comercio prácticamente informal en divisas”.
El activista acotó que son dos contradicciones, por un lado los bodegones y mega supermercados y por otro lado un cierre de mercados populares y racionamiento de compra por número de cédula. “Estas son dos muestras de las distorsiones de la economía. La única forma de recuperar la producción es a través de un cambio urgente de modelo y de gobierno, mientras siga el régimen de Maduro en el poder seguirán las distorsiones, la escasez, el racionamiento y la hiper inflación, mientras unos pocos se enriquecen, la mayoría de los venezolanos pasa hambre y calamidades”.
Comunicado de prensa