Un procedimiento criminal ha sido iniciado por un fiscal especial suizo en el marco de una investigación sobre un encuentro de Gianni Infantino, el presidente de la FIFA, con el procurador especial del país helvético, Michael Lauber, quien ya renunció a su cargo.
La Justicia suiza anteriormente ya había identificado elementos de conducta criminal en relación con ambos sospechosos.
En 2016 y 2017, Infantino y Lauber habrían mantenido tres encuentros de manera secreta y ambos negaron inicialmente haber actuado de manera ilícita.
Lauber, cuya oficina investigaba presunta corrupción dentro de la FIFA, presentó su renuncia la semana pasada luego de que una corte determinara que el procurador había mentido a sus superiores para ocultar sus reuniones con Infantino.
El predecesor de Infantino, Sepp Blatter, abandonó la FIFA en 2016 en medio de un escándalo de corrupción asociado con pagos a su presunto sucesor, Michel Platini, por entonces presidente de la UEFA.
Infantino ha sido acusado de intentar blanquear la reputación de la FIFA mientras Lauber investigaba el caso.