Un informe de la ONG Archivo Cuba reveló este jueves que “en los últimos meses” han ocurrido al menos seis suicidios en las cárceles cubanas sin que el Estado haya dado cuenta de ellos, y señala como causas las “malas condiciones de vida dentro del penal, castigos excesivos y en muchas ocasiones desmedidos”.
“Siempre hemos sospechado que ocurren muchas muertes no reportadas de personas bajo custodia en Cuba. Se trata de personas olvidadas a las que nadie mira por no estar clasificadas como prisioneros políticos o de conciencia”, dijo a Efe María Werlau, directora de la ONG.
El documento elaborado por Archivo Cuba a partir de informes suministrados por la organización opositora Alianza Democrática Orienta, remite una base de datos que documenta asesinatos extrajudiciales en Cuba y muertes por suicidio no declaradas oficialmente desde 1959.
Archivo Cuba, con sede en Miami, tiene documentados 1.111 suicidios en cárceles cubanas.
De los seis suicidios ocurridos “en los últimos meses”, cuatro ocurrieron en la Prisión Provincial Típico de Las Tunas, en la zona este de la isla.
Los fallecidos fueron Jorge Rodríguez Pérez, de 27 años , que según esta fuente amaneció ahorcado en un pasillo, y Wilder Carrasco Téllez, Armando García Álvarez y Luis Miguel Sánchez Carrero. Estos tres últimos, de los que no se indica la edad, se ahorcaron en una celda de castigo.
También se reporta el suicidio de Alfredo Borges Barrera, alias “La Manta”, en la prisión provincial Combinado de Guantánamo, “supuestamente” por una sobredosis de medicamentos, y el de Lázaro Bruzón Formental en la Prisión Kilo 8 de Camagüey tras una golpiza a manos de un militar, según Archivo Cuba.
De acuerdo con el documento, “esta valiosa información fue recopilada por valientes activistas de derechos humanos dentro de Cuba en llamadas telefónicas con prisioneros en esas instalaciones”.
El documento detalla que “debido a que todas las llamadas son monitoreadas, los reclusos que informaron sobre la muerte de sus compañeros de prisión fueron severamente castigados con 21 días en celdas de aislamiento y visitas familiares restringidas”, entre otros castigos.
“Esto es un problema que existe hace tiempo y a mí me consterna mucho. Gran parte de los reclusos que mueren en las cárceles de Cuba son de la raza negra y nadie habla de ellos”, explica Werlau.
Según la activista estadounidense de origen cubano, estas personas “van a prisión porque no tienen un empleo y son acusados de ‘peligrosidad social predelictiva’, que de por sí esto es un cuestión política además de una aberración”.
Werlau vinculó estos casos con otros de presos comunes que, según dijo, han cumplido “hasta 15 años de cárcel por matar una vaca de su propiedad”.
Según la web de Free Society Project, también conocida como Archivo Cuba, esta es “una organización sin fines de lucro incorporada en Washington, D.C. en 2001 para promover los derechos humanos mediante estudios y publicaciones”.
EFE