Las bolsas de comida de los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP) no son ni la sombra de lo que eran en años anteriores, pues estas ahora sólo traen harina, arroz y frijoles chinos, alimentos que no son suficientes para mantener una dieta balanceada.
Por Daimar Díaz | LA PRENSA DE LARA
Hartos de comer lo mismo, los guaros expresan que les ha tocado rebuscarse para poder cubrir el costo del resto de los productos de la cesta básica, pues en la mayoría de sectores de la ciudad, este “beneficio” no es distribuido con frecuencia sino cada 2 meses.
“Los gobernantes piensan que uno come cada dos meses, o que cuatro kilos de arroz y tres de frijoles chinos alcanzan para ese tiempo, toca hacer de tripas corazón para comprar los alimentos que hacen falta”, manifestó Oscar Bermúdez, habitante de San José.
Mientras en brisas del Obelisco denuncian que la bolsas son cobradas asegurando que llegarán de manera inmediata, pero transcurre hasta un mes, y piden una diferencia en dinero por el supuesto aumento de estas bolsas.
“Cuando dicen que van a llegar cancelamos una tarifa, pasa el tiempo y luego nos piden más dinero porque según aumentaron, no hay control con los precios”, dijo Roger Leal.