Tras siglos de saqueos, guerras y colonizaciones, es cada vez más difícil encontrar vestigios del antiguo Egipto. Pero eso fue precisamente lo que descubrió un grupo de arqueólogos en una excavacación en Saqara, donde se hallaron al menos 13 sarcófagos intactos y sellados de hace 2.500 años.
Según informó el Ministerio de Turismo y Antigüedades, el descubrimiento se produjo en un pozo de 11 metros de largo. Allí, los estudios preliminares indican que los ataúdes de madera están completamente cerrados y no se han abierto desde el momento del entierro. Además, los expertos señalan que es posible que no sean los únicos de la zona, siendo probable que haya otros sarcófagos en los nichos de los flancos del pozo.
Por el momento no hay información sobre las personas enterradas. En los últimos años se han realizado varios descubrimientos en la zona, que no solo incluye grandes entierros para figuras señoriales de la época, también para trabajadores de clase media.
De ser correcta la estimación de la antigüedad, el entierro correspondería a la época del Imperio Antiguo, que fue cuando se forjó y consolidó el sistema político, cultural y religioso en torno al faraón.
Los ataúdes, que todavía conservan buena parte de sus colores, estaban apilados unos sobre otros. Las fotos permiten distinguir la pintura azul, blanca, roja y negra, entre otros tonos.
El ministro del área, Khalid Alanani, compartió el video y adelantó que es “solo el comienzo”, confiado en que el pozo arrojará nuevas sorpresas. “Es una sensación indescriptible cuando uno es testigo de un nuevo descubrimiento arqueológico”, comentó. Además, agradeció los investigadores por trabajar en condiciones difíciles y comprometidos con los procedimientos.
Se trata del mayor descubrimiento en la zona desde octubre del año pasado, cuando se produjo el mayor hallazgo en un siglo: 30 sarcófagos en Luxor.