No lo hizo y no lo hará en el futuro. Y la razón es muy sencilla: Nunca se lo plantearon.
Fue el sistema de propaganda iraní el que propagó la mentira al mundo. El 20 de mayo, cuando se supo que cinco tanqueritos iraníes venían rumbo a Venezuela, el ministro de Defensa de Irán, el general Amir Hatami, advirtió a EEUU que el régimen de los ayatolá “no tolerará ningún acto de piratería” contra los buques iraníes que trasladaban combustible a Venezuela. El ministro sustuvo que “cualquier problema con los petroleros va en contra de las normas internacionales y de la seguridad” de navegación, por lo que ha instado a “todos los países y organizaciones que sean sensibles a la seguridad de navegación” a que reaccionen contra lo que “constituye un acto de piratería”.
Los buques llegaron, descargaron y se fueron.
Y EEUU reaccionó con las herramientas que hasta el momento ha venido utilizando, las sanciones.
El 24 de junio, el Departartamento del Tesoro de EEUU publicaba “En el día de hoy, la Oficina de Control de Activos Extranjeros (Office of Foreign Assets Control, OFAC) del Departamento del Tesoro de los Estados Unidos tomó medidas contra los capitanes de cinco buques que las firmas sancionada por EE.UU., Islamic Republic of Iran Shipping Lines (IRISL) y National Iranian Tanker Company (NITC), utilizaron para entregar gasolina iraní al régimen ilegítimo de Maduro en Venezuela. Estos capitanes que condujeron cinco buques tanque de bandera iraní —CLAVEL, PETUNIA, FORTUNE, FOREST y FAXON— entregaron gasolina y componentes de gasolina a Venezuela, y ahora se agregan a la Lista de Ciudadanos Especialmente Designados y Personas Bloqueadas (Lista SDN) de la OFAC”
En agosto, cuatro barcos de bandera griega que se dirigían a Venezuela con combustible iraní desecharon sus entregas después de que Estados Unidos les recordó que podrían ser afectado por sanciones. Voluntariamente se dirigieron a Houston donde descargaron la gasolina.
El sistema de propaganda iraní reaccionó. El ministro iraní de Petróleo, Biyan Zanganeh, dijo el18 de agosto que el combustible incautado por Estados Unidos era originario de Irán pero le pertenecía a Venezuela, país que ya había comprado la gasolina. “Ni los barcos ni los cargamentos le pertenecían a Irán, pero esos cargamentos incluían gasolina vendida por Irán a Venezuela”, reconoció el ministro, según publicó la agencia Shana, dependiente del Ministerio de Petróleo de Irán.
Ahora de nuevo, tres de esos tanqueros se dirigen a Venezuela. No sabemos si al mando de los capitanes sancionados. Les queda entre 10 y 15 días de travesía. El Forest, el Fortune y el Faxon descargarán en Venezuela los aproximadamente 900 mil barriles que supuestamente traen en conjunto (143 MM lts)
La propaganda busca ocultar la verdad. La primera es que al pranato nadie le fía y que esa gasolina la debe pagar anticipadamente. La otra verdad es que los saqueadores no devuelven el dinero saqueado. Con poca plata es poco lo que puede importar. Por otro lado Irán es un exportador ocasional de gasolina y ha podido exportar porque la pandemia les ha contraido su demanda interna. Esa es una “solución” temporal.
La inocultable verdad es que la sanción es el socialismo
@morandavid