En el Sur de California, se realizó el funeral de Emrik Osuna, un niño latino que fue torturado hasta la muerte por su madrastra; de acuerdo con las autoridades de Idaho.
Por Noticias Ya
El padre de la víctima, Erik Osuna Gutiérrez, de 29 años, y su pareja, Monique Osuna, de 27 años, fueron arrestados por la muerte y tortura del menor. Ambos se encuentran detenidos bajo una fianza de $2 millones a cada uno.
El 1 de septiembre, la policía local encontró a Emrik inconsciente en su casa tras responder a una llamada al 911. El menor falleció esa misma noche, en la unidad de cuidados intensivos de un hospital de Meridian.
De acuerdo con las autoridades, cuando encontraron a Emrik, el niño tenía moretones en varias partes del cuerpo, salía vómito de su boca, estaba pálido y visiblemente desnutrido.
“Los oficiales observaron que la víctima mostraba signos de abuso. La víctima fue transportada por paramédicos a un hospital, donde fue declarado muerto”, dijo la Policía de Meridian en un comunicado.
El padre de la víctima fue acusado por lesiones graves a un niño, lesiones corporales graves y destrucción de pruebas. Mientras que la mujer se enfrenta a un cargo de asesinato en primer grado.
Las autoridades detallaron que Emrik vivió abusos extremos mientras se encontraba bajo la responsabilidad de Monique Osuna, durante el tiempo encerrados en casa por la pandemia.
La mujer trabajaba desde casa y se suponía que supervisaría a Emrik durante sus clases virtuales. Sin embargo, lo único que el pequeño recibió fueron maltratos físicos que resultaron en su muerte; indicó la acusación penal.
Emrik sufrió una “tortura horrible” a lo largo de varios meses, incluyendo que sólo lo alimentaban con arroz y agua, además era sometido a brutales golpizas y duros castigos; dijo la fiscal Tamara Kelly a la corte, el 3 de septiembre.
“Dado que (Emrik) no acudió a la escuela, esencialmente tuvo acceso a él todo el día”, dijo Kelly. “El niño tenía moretones en todo el cuerpo, específicamente en los glúteos, la ingle, las piernas y el torso. Algunos de los moretones eran extremadamente grandes y básicamente cubrían la parte posterior de su cuerpo”.
La acusada admitió a los detectives que golpeó varias veces a Emrik, dándole una patada en la ingle y pagándole con un cinturón, una correa de perro, una cuchara de madera y un palo para rascar la espalda, dijo Kelly, agregando que cada vez iba usando un objeto más pesado para hacer más daño.
Además del abuso físico, Emrik fue obligado a dormir en un pequeño armario por las noches. Todo esto fue presenciado por el padre del menor, quien “admitió que no hizo nada para salvar a su hijo”, dijo Kelly.
Osuna Gutiérrez admitió que intentó obstruir la investigación para que no acusaran a su pareja, al tomar la cámara de vigilancia dentro de su casa y dándosela a otra persona para que la escondiera. El video fue recuperado por la policía y es parte de la evidencia.
El día de la muerte de Emrik, alrededor de las 5:00 pm, Monique Osuna envió un mensaje a Osuna Gutiérrez diciéndole que tenían que llevar al niño al hospital. Sin embargo, los adultos prolongaron la agonía y no llamaron al 911 hasta horas después. Los paramédicos llegaron a las 9:39 pm a la residencia.
Emrik tenía 3 hermanos, de entre 4 meses y 9 años, los cuales fueron puestos bajo la supervisión de autoridades de servicios infantiles. Un juez determinó que los padres no deben tener contacto con ellos.