El presidente de Bolivia, Luis Arce, partió este domingo a Brasil para someterse a un control médico de rutina por un cáncer de riñón diagnosticado en 2017, en su primera salida del país desde que asumió el mando en noviembre pasado.
“Es un examen de rutina. Todos los años me lo estoy haciendo y esperemos que todo, como hasta ahora, salga bien. Estoy bien, pero siempre la prevención es la mejor medicina”, declaró el mandatario a la agencia estatal de noticias ABI antes de abordar el vuelo comercial que lo trasladó al país vecino.
El retorno del jefe de Estado boliviano está previsto para la tarde del lunes, precisó el vocero presidencial Jorge Richter.
Durante la ausencia de Arce, el vicepresidente, David Choquehuanca, asumirá la presidencia del país andino.
“La evaluación médica se realiza en Brasil donde está su ficha médica y donde fue atendido desde un inicio”, explicó Richter en respuesta a la oposición, que criticó que el mandatario no acudiera al sistema sanitario boliviano.
El vocero exhortó a los opositores “a no hacer política desde la salud del presidente” y a “mantener la salud en el ámbito privado de las personas”.
Arce fue ministro de Economía del expresidente izquierdista Evo Morales y renunció en 2017 después de que se le diagnosticara un cáncer de riñón. Concluido su tratamiento médico en Brasil, reasumió la cartera de Economía en enero de 2019.
AFP