Después de perder ante Dustin Poirier en el UFC 257, el peleador irlandés Conor McGregor ha vuelto a su vida de lujos. Por suspensión médica, podría estar sin subir al octógono los próximos seis meses tras sufrir el primer nocaut de su carrera de MMA, por lo que tendrá tiempo para sus excentricidades. Como por ejemplo, comer un jugoso filete bañado en oro.
Por Infobae
McGregor aprovechó su estadía en los Emiratos Árabes para visitar Dubai y cenar en el famoso restaurante de Nusret Gökce, el famoso chef turco conocido en las redes sociales como Salt Bae, quien habitualmente le cocina a deportistas o celebridades de talla mundial en sus distintos locales.
El luchador irlandés de 32 años comió un filete bañado en oro que cuesta 1.000 dólares junto a su familia, su esposa Dee Devlin y sus hijos, Conor Jr. y Croia. Este plato se llama Golden Tomahawk y es carne de vaca japonesa (Wagy?) envuelta en una hoja de oro de 24 quilates.
Esta cena no es un gasto para nada significativo para un McGregor que ha embolsado mucho dinero a lo largo de su carrera deportiva y también ganó una cifra muy alta pese a perder con Poirier. Aunque Dana White no quiso revelar los valores que habían ganado ambos, algunos medios especializados hablan de que The Notorious recibió USD 5 millones por subir nuevamente al octógono.
Lógicamente, a esa cantidad habría que también sumarle el dinero correspondiente al Pay Per View, por lo que McGregor podría haber embolsado unos USD 25 millones en total. No fue su pelea más lucrativa –ante Cerrone llegó a los USD 60 millones y contra Mayweather ganó USD 85 millones– pero ayudó para sostener su costoso ritmo de vida.
Y seguramente, tras la suspensión de seis meses, McGregor vuelva a prepararse para combatir otra vez para recolectar aún más dinero. Una de las posibilidades es hacer una pelea para completar la trilogía con Poirier, aunque también está latente un nuevo enfrentamiento con Khabib Nurmagomedov o incluso existe la posibilidad de que vuelva al boxeo para hacer un evento con Manny Pacquiao.