Una mujer, tras identificarse como miembro de un grupo paramilitar y a quien supuestamente conocían con el alias de la Patrona, fue detenida por funcionarios de Politáchira, luego de causar daños en una vivienda y presuntamente amenazar de muerte a un hombre, en el municipio Andrés Bello.
Por Miriam Bustos / lanacionweb.com
El día martes, en la tarde, efectivos de Politáchira, adscritos al Centro de Coordinación Policial Cordero, fueron notificados, vía telefónica, de una situación irregular que se estaba registrando en el sector Bella Vista, de la aldea Monte Carmelo, vía Las Tablas.
Una vez en el sitio, unas personas les confirmaron la denuncia a los uniformados. Dijeron que la mujer, que estuvo entre seis y ocho meses en Colombia, armada de una pistola, amenazó con asesinar a un hombre que estaba dentro de un vehículo.
También habría hecho lo propio con un segundo hombre. Igualmente la acusaron de haber roto las ventanas de una residencia, al parecer propiedad de la primera víctima.
Sin embargo, para el momento del arribo de la comisión policial, la dama en cuestión ya no se encontraba en el sitio. La describieron como una señora trigueña, de mediana estatura y contextura media, que vestía un vestido largo, rojo, y que aseguró a los presentes ser una paramilitar.
Minutos después de una búsqueda en el sector, los policías hallaron a la sospechosa, escondida en una construcción cercana, entre la zona boscosa. Aunque no se resistió al arresto, al chequearla corporalmente no le encontraron ningún elemento de interés criminalístico.
Una búsqueda exhaustiva del arma de fuego, que dijeron los testigos que tenía, efectivamente permitió hallarla. La mujer la había enterrado.
Se trata de una pistola, calibre 9mm, marca SIG Sauer, de fabricación alemana, perteneciente a las Fuerzas Armadas de Venezuela, según serial VE002658, con un cartucho sin percutir, arma cuya procedencia ahora está siendo indagada.
A ella la identificaron como L. Lozada, venezolana, de 38 años de edad, quien fue puesta a la orden de la Fiscalía de Flagrancia del Ministerio Público, por los delitos de porte ilícito de arma de fuego y amenaza.
Según las autoridades, una motivación pasional llevó a Lozada a actuar de la manera como lo hizo.