El presidente estadounidense, Joe Biden, firmará este viernes el paquete de estímulo fiscal de 1,9 billones de dólares para contener la crisis provocada por la pandemia de la covid-19, su primera victoria legislativa desde que llegó al poder en enero.
La portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, afirmó este miércoles que Biden planea rubricar y convertir en ley “el viernes por la tarde” el plan de rescate que está a punto de superar un voto definitivo en la Cámara de Representantes, tras ser aprobado en ese hemiciclo y en el Senado.
Será la primera ley que firma Biden desde que llegó al poder el 20 de enero, y la ceremonia tendrá lugar casi en el ecuador -el día 51- de sus primeros 100 días en la Casa Blanca.
“Vamos a actuar a toda velocidad en la implementación de la ley, porque el pueblo estadounidense necesita ayuda lo antes posible”, aseguró Psaki durante su rueda de prensa diaria.
La Casa Blanca considera el proyecto de ley uno de los planes “más progresistas” que se han aprobado en la historia moderna de Estados Unidos, en palabras de Psaki, y tiene previsto dedicar las próximas semanas a promocionarlo y “venderlo” al pueblo estadounidense.
“El presidente va a viajar (para promoverlo), la vicepresidenta (Kamala Harris) va a viajar, la primera dama va a viajar. Tendremos gente comunicándose directamente con las comunidades”, aseguró Psaki.
Biden opinó el mes pasado que, cuando el expresidente Barack Obama consiguió aprobar un plan de estímulo en 2009, cometió un error al no dedicar muchos recursos a promocionarlo, y “pagó el precio por esa humildad” con un varapalo a su partido en las elecciones legislativas del año siguiente.
El nuevo mandatario quiere que su plan de estímulo, conocido como Plan de Rescate Estadounidense, tenga el efecto contrario y ayude a los demócratas en los comicios legislativos de 2022, por lo que ha pedido a su equipo que se dedique a promocionarlo.
La Casa Blanca incluso se planteó poner el nombre del presidente en los cheques únicos de 1.400 dólares a los contribuyentes que tengan ingresos inferiores a los 80.000 dólares anuales por persona que se van a distribuir como parte del plan, pero finalmente decidió no hacerlo, según el diario The Washington Post.
El proyecto de ley también amplía hasta comienzos de septiembre las ayudas al desempleo, de 300 dólares semanales, ya que los actuales fondos expiran el 14 de marzo, fecha límite que se han marcado tanto la Casa Blanca como los demócratas en ambas cámaras para tener el proyecto finalizado.
Además, el paquete asigna 350.000 millones de dólares para gobiernos locales y estatales, 170.000 millones para la reapertura de las escuelas, 14.000 millones de dólares para fortalecer el plan de vacunación y otros 46.000 millones para el sistema de pruebas para la detección del coronavirus.
De ser finalmente aprobado, el rescate impulsado por el presidente Joe Biden se uniría al de 900.000 millones de dólares que el Congreso impulsó en diciembre y al de 2,2 billones de dólares, el mayor de la historia del país, en marzo de 2020, bajo la Presidencia del republicano Donald Trump. EFE