Gudelia Vallinas (37) sufrió una herida de bala mortal en la cabeza al quedar atrapada en el fuego cruzado de dos pandillas enfrentadas anoche en Queens (NYC).
Fue el segundo caso similar en menos de una semana, luego de la muerte de Stephanie Muñoz (28), baleada la madrugada del domingo afuera de un lugar de fiestas en Brooklyn, en un aparente intercambio de disparos entre pandillas.
Vallinas, empleada de limpieza, perdió la vida afuera de Woodside Houses, en la intersección de Broadway y 48th St, Queens. Fue baleada cerca de las 8:15 p.m., cuando estaba haciendo compras para sus dos hijos.
La policía recibió una llamada al 911 de un residente del complejo de viviendas públicas NYCHA, diciendo que unos cinco o seis adolescentes de dos grupos estaban intercambiando disparos mientras se perseguían entre sí por el edificio, según las fuentes.
Cuando el tiroteo se extendió a la calle, la transeúnte Vallinas se convirtió en un objetivo involuntario. Vivía cerca de la calle 48 y fue declarada muerta en el Elmhurst Hospital.
“Ella está en buenas manos, en las manos de Dios ahora”, dijo su suegro, Miguel Vallinas, y agregó que aún no está claro si será enterrada en el México, país natal de la familia.
Un vecino que escuchó los disparos culpó de la violencia en la zona a la controvertida medida de reforma penal de las fianzas. No se han realizado arrestos y se está llevando a cabo una investigación, informó New York Post.
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